Los inversores madrileños no entraron en juego

Se dieron mus. Los especialistas del mercado madrileño no quisieron entrar a la jugada alcista que se anunciaba desde la Bolsa de Barcelona y prefirieron esperar a que fuesen otros quienes jugasen las cartas, que por lo demás estaban aparentemente muy cantadas. Los dos pitos que llevaban de mano los vendedores hicieron a los operadores a corto reconsiderar sus posiciones, y a pesar de que aparentemente llevaban mejor jugada, no se atrevieron a forzar la partida. Como consecuencia, las reuniones discurrieron por unos cauces aburridos, donde se buscaban con lupa las oportunidades de gener...

Se dieron mus. Los especialistas del mercado madrileño no quisieron entrar a la jugada alcista que se anunciaba desde la Bolsa de Barcelona y prefirieron esperar a que fuesen otros quienes jugasen las cartas, que por lo demás estaban aparentemente muy cantadas. Los dos pitos que llevaban de mano los vendedores hicieron a los operadores a corto reconsiderar sus posiciones, y a pesar de que aparentemente llevaban mejor jugada, no se atrevieron a forzar la partida. Como consecuencia, las reuniones discurrieron por unos cauces aburridos, donde se buscaban con lupa las oportunidades de generar beneficios rápidos, mientras que los vendedores mantenían sus tímidos planteamientos con los que fundamentalmente pretenden no asustar a los posibles compradores.El mercado de acciones barcelonés continuó manifestando una clara trayectoria positiva, que alcanzaba un mayor realce al ser comparada con las evoluciones de las otras tres bolsas. únicamente Madrid, conseguía cerrar presentando un balance discretamente positivo apoyado con fuerza en los 6,22 puntos de avance que mostraba el indicador particular del sector siderúrgico, donde el comportamiento favorable de Bendibérica, que ayer iniciaba su ampliación de capital, tuvo un claro efecto aglutinante. Tanto las acciones como los derechos de suscripción de este valor marcaron dinero sin operaciones como consecuencia de las insuficiencias que manifestó la oferta. Duro Felguera por su parte contribuyó de forma destacada a animar este festival alcista obteniendo un avance en sus cotizaciones de 9 enteros.

Los valores eléctricos continúan mostrándose afectados de una parálisis casi total que les lleva a corregir los movimientos del día anterior, con una insistencia machacona, y siempre en sentido contrario. No parece que por el momento estos valores vayan a quitar el sueño a los especialistas, que al parecer han vuelto a asimilarlos, en cuanto a estrategia operativa, a los títulos de renta fija.

En cuanto al grupo bancario el único aspecto que merece algún tipo de mención especial en cuanto a su comportamiento se refiere lo constituye el hecho de que su saldo genérico de oferta se redujo discretamente. Al menos este era el fenómeno que se podía apreciar referido al conjunto de los siete grandes, donde las diferencias negativas conjuntas descendían a poco más de 70.000 títulos, desde los más de 100.000 de la jornada anterior.

Con todo Banesto volvió a resultar la entidad más desequilibrada en sus saldos, presentando una diferencia vendedora superior a las 41.000 acciones en el mercado madrileño. El resto de sus compañeros, y como ya viene siendo costumbre, observaban unos desequilibrios bastante más moderados entre el número de títulos que tenían puestos a la venta, y los que se demandaban. No obstante los recortes en los precios continuaron constituyéndose en moneda de curso común, y aquellos valores que conseguían repetir alcanzaban casi el carácter de héroes con su actitud.

Para las reuniones de hoy, los ánimos aparecen bastante más calmados, y aunque no sea descartable la reacción de tipo técnico, algunos de sus más acérrimos defensores de ayer, han pasado a manifestar algunas reservas, ante la proximidad de cierre del ciclo semanal.