Reagan fomentará la recuperación económica a cambio de la solidaridad aliada ante la URSS

Los siete países más industrializados de occidente llegaron ayer en Williamsburg a un acuerdo de caballeros, mediante el cual los aliados de Washington coincidieron en calificar como global e indivisible su seguridad frente a la URSS, y el presidente Ronald Reagan prometió realizar cuantos esfuerzos estén en su mano para fomentar la recuperación económica más allá de las propias fronteras de Estados Unidos.Los jefes de Estado o de Gobierno de las siete potencias industriales dejaron ayer constancia, en el documento final de la cumbre de Williamsburg leído por Reagan, de estar mucho más ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los siete países más industrializados de occidente llegaron ayer en Williamsburg a un acuerdo de caballeros, mediante el cual los aliados de Washington coincidieron en calificar como global e indivisible su seguridad frente a la URSS, y el presidente Ronald Reagan prometió realizar cuantos esfuerzos estén en su mano para fomentar la recuperación económica más allá de las propias fronteras de Estados Unidos.Los jefes de Estado o de Gobierno de las siete potencias industriales dejaron ayer constancia, en el documento final de la cumbre de Williamsburg leído por Reagan, de estar mucho más unidos en lo político que en lo económico, según informan desde la ciudad colonial de Virginia los enviados especiales La llamada Declaración de Williamsburg sobre Recuperación Económica considera que el crecimiento de la oferta monetaria "debe ser disciplinado y no inflacionario" y perseguir la existencia de unos tipos de interés apropiados. Será objetivo de los siete, en clara referencia a la actual política de EE UU, "reducir los déficits presupuestarios estructurales tener en cuenta las consecuencias de la política fiscal sobre los tipos de interés y el crecimiento".

Pese a las diferencias, los siete consiguieron ponerse de acuerdo en una declaración final que proclama la necesidad de mantener una disciplina fiscal, mantener una cierta estabilidad en los tipos de cambio y reducir las elevadas tasas de interés con el fin de asegurar la recuperación en curso.

El comunicado final hace un canto a la libertad del comercio y pide que todos multipliquen sus esfuerzos para reducir la tendencia al proteccionismo. En este apartado, las críticas llovieron sobre Japón y EE UU. En Williamsburg, estuvieron presentes los cuatro países más industrializados de Europa (Francia, RFA, Italia y Gran Bretaña), Canadá, Japón y Estados Unidos.

Páginas 2 y 3

Editorial en la página 8

Archivado En