Sillones desfondados

Una silla desfondada no es un trabajo difícil para un bricolador aficionado. Sólo con estas herramientas podrá repararla: grapadora (o martillo y tachuelas), aguja curva (sirve una para lana; ha de ser fuerte), tenazas, destornillador; y estos materiales: bramante, arpillera, cincha (es el único material un tanto inusual. Se encuentra en almacenes de lonas, colchonerías o almacenes especializados. Es una banda de un tejido semejante a la arpillera, muy fuerte).Cuando una silla se desfonda, se rompen las telas y sujecciones de los muelles, y éstos aparecen por debajo.

Empiece quitando la...

Una silla desfondada no es un trabajo difícil para un bricolador aficionado. Sólo con estas herramientas podrá repararla: grapadora (o martillo y tachuelas), aguja curva (sirve una para lana; ha de ser fuerte), tenazas, destornillador; y estos materiales: bramante, arpillera, cincha (es el único material un tanto inusual. Se encuentra en almacenes de lonas, colchonerías o almacenes especializados. Es una banda de un tejido semejante a la arpillera, muy fuerte).Cuando una silla se desfonda, se rompen las telas y sujecciones de los muelles, y éstos aparecen por debajo.

Empiece quitando la tela (normalmente arpillera) que tapa la silla por debajo. Retire las grapas o tachuelas con tenazas y destornillador.

Aparecerán las antiguas cinchas de la silla, rotas por los muelles. Retírelas del mismo modo. Debajo encontrará los muelles. No los separe del asiento, donde estarán sujetos.

Haga un entramado de cincha nueva sustituyendo, a la vieja. Para ello, clave o grape la cincha (puesta doble) al marco de la silla fuertemente. Tendrá que empujar los muelles para que la cincha quede Hen tensa entre los lados de la silla. Las cinchas deben ir entrelazadas (una por encima, una por debajo).

Coloque los muelles verticales respecto a las cinchas ya colocadas. Sujételos a ellos con unas puntadas hechas con bramante y una aguja curva, sin la cual sería difícil coserlos. Los muelles necesitan unas seis puntadas bien apretadas para que no se muevan al sentarse.

La mayor parte del trabajo ya está ' hecho: sólo queda cubrir las" cinchas para rematar por debajo la silla. Use una arpillera recortada al tamaño de la silla (doblada en los bordes para que no queden flecos).

Para dar un remate mejor puede usar en vez de arpillera un retor blanco o de un color adecuado al de la tapicería, rematado también en dobladillo y sujeto con grapas.

Un consejo: si va a comprar una grapadora, elija una que, además, sea clavadora. Le servirá para infinidad de trabajos, sustituyendo a los clavos finos de cabeza perdida.