Tribuna:

Las bolsas moderan el ritmo de sus pérdidas

Los mercados de valores nacionales moderaron ayer el vertiginoso ritmo de caída al que se habían visto sometidos en las últimas reuniones y corno consecuencia directa de algunos repuntes compradores surgidos tras las fuertes pérdidas de días anteriores. Constructoras y eléctricas llevaron la peor parte en el balance general de las reuniones. Sobre estos sectores se centró con mayor determinación la actividad de los vendedores, a pesar de que una vez concluido el período hábil de contratación surgían ciertos tanteos compradores, bastante selectivos y cautos, que interesaban a un nutrido grupo d...

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Los mercados de valores nacionales moderaron ayer el vertiginoso ritmo de caída al que se habían visto sometidos en las últimas reuniones y corno consecuencia directa de algunos repuntes compradores surgidos tras las fuertes pérdidas de días anteriores. Constructoras y eléctricas llevaron la peor parte en el balance general de las reuniones. Sobre estos sectores se centró con mayor determinación la actividad de los vendedores, a pesar de que una vez concluido el período hábil de contratación surgían ciertos tanteos compradores, bastante selectivos y cautos, que interesaban a un nutrido grupo de valores de los que normalmente suelen presentar un mayor nivel de contratación, dándose el caso de que entre éstos incluso llegaron a insertarse un par de bancos.Lo cierto es que, en opinión de los especialistas, a pesar de no haber resultado el sector bancario el más desfavorecido ayer por la actitud de los operadores, objetivamente resulta el que más dificultades puede presentar para incorporarse a un nuevo sesgo positivo en la tendencia genérica del mercado.

No obstante, como matiz adicional se cuenta con el voluntarismo de los propios integrantes del sector y con el mismo incremento de las cautelas entre los vendedores, que ya han provocado un apreciable descenso en los respectivos saldos vendedores.

Así, la diferencia negativa genérica que presentaban los grandes del grupo bancario en el mercado madrileño descendía ayer hasta la todavía respetable cifra de 512.326 títulos, observándose al cierre de la reunión la presencia de algunas partidas compradoras especialmente susceptibles de contribuir a mejorar los cambios de valores, como Hispano y Santander, en reuniones inmediatas, siempre según las versiones de algunos de los más cualificados especialistas.

La materialización de esta posibilidad indiscutiblemente animaría al resto de los integrantes del sector y, en especial, contribuiría a aumentar la presencia de órdenes de venta en sus corros. Por el momento, el más afectado, con diferencia, por la furia de los vendedores resulta Banesto, que en la reunión de ayer presentó más de 320.000 acciones como diferencia formal entre el número de órdenes vendedoras y las compras cursadas en favor de las primeras. En cuanto al grupo eléctrico, las fuertes bajas que han experimentado los precios de estas acciones en los últimos días han provocado una reacción en contra, y algunos responsables de carteras institucionales buscaban ayer el cubrirse de las ventas realizadas con anterioridad ante un posible cambio en la tendencia del mercado.

A esta situación contribuyó notablemente la fuerte baja aceptada por Iberduero en el precio de sus acciones tras el anuncio de su recorte en el dividendo. Posiblemente, sus responsables jugaron con la posibilidad de que el propio mercado fijase un cambio de referencia que pudiera considerarse "tope a la baja", y por eso lo dejaron caer, casi a tumba abierta, en el mercado bilbaíno el pasado martes. Si esto era lo que pensaban, hay que reconocer que estaban en la tesis correcta, pues los propios operadores se encargaron de corregir al alza su cotización inicial, e incluso se transmitían en la mañana de ayer órdenes compradoras a Madrid que estabilizaron los precios de este valor en torno al 42%.

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