Yugoslavia debe continuar al margen de los bloques militares, según Felipe González

La televisión yugoslava emitió anoche una entrevista con el jefe del Gobierno español, Felipe González, en la que recordó que éste ha aceptado una invitación para visitar Belgrado. Entre Yugoslavia y España no existe conflicto alguno, y "no hay problema alguno que no puede solucionarse por los cauces bilaterales normales".Ambos países tienen, en opinión del presidente del Ejecutivo español, una responsabilidad de enormes dimensiones ante el Mediterráneo. Felipe González quisiera que Yugoslavia siguiera desempeñando lo que definió como su cometido hasta ahora: "un papel decisivo en la distensió...

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La televisión yugoslava emitió anoche una entrevista con el jefe del Gobierno español, Felipe González, en la que recordó que éste ha aceptado una invitación para visitar Belgrado. Entre Yugoslavia y España no existe conflicto alguno, y "no hay problema alguno que no puede solucionarse por los cauces bilaterales normales".Ambos países tienen, en opinión del presidente del Ejecutivo español, una responsabilidad de enormes dimensiones ante el Mediterráneo. Felipe González quisiera que Yugoslavia siguiera desempeñando lo que definió como su cometido hasta ahora: "un papel decisivo en la distensión, en el desarrollo del movimiento de los no alineados, fundamental en el hallazgo de fórmulas distintas a los enfrentamientos y afines a la cooperación pacífica. Esa es la acumulación histórica unida al nombre de Yugoslavia".

Felipe González dijo también que el ascenso de los socialistas y de la izquierda en general en el sur de Europa quizá sea "una llamada desesperada del sur de Europa en pro de un equilibrio territorial del viejo continente, una llamada de ese sur que es el menos desarrollado y más abandonado".

"La Europa meridional", agregó el jefe del Gobierno español, "está cerca de los problemas del mundo en desarrollo y por eso es consciente de la necesidad de diálogo entre el norte rico y el sur pobre. ¿Cuáles son las causas profundas de las que surge ese fenómeno de auge socialista en Francia, España, Grecia y, quizá mañana, también en Portugal? Creo que son muy complejas y sería arriesgado analizarlas".

Felipe González comentó los tres meses transcurridos desde la toma de posesión de su Gabinete y se declaró "satisfecho por los esfuerzos que hemos hecho, aunque sería pretencioso hablar de satisfacción por lo realizado". Dijo también que "se ha hecho mucho en los primeros cien días, pero no me voy a presentar como satisfecho, porque siempre quise hacer más y mejor. Llegamos al poder en medio de una situación repleta de problemas sin solución a los que había que dar respuesta inmediata".

"El fenómeno del terrorismo es excepcionalmente serio y peligroso" añadió. "Un país democrático puede vencerlo, pero en la situación en que hoy se encuentra España, con una experiencia democrática todavía quebradiza, el terrorismo suscita reacciones y ambiciones, de soluciones autoritarias".

Refiriéndose a la "transformación de un poder fuertemente centralizado y dictatorial" en otro democrático con una estructura de gobiernos autónomos en cada región, Felipe González consideró ese proceso un "problema político de primer orden y pasarán años antes de que demos con una respuesta satisfactoria, por ser un proceso que se abrió en forma explosiva y a un ritmo todavía no registrado por la historia".

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