Tribuna:

Discreto balance positivo

El cierre bursátil de la semana ha terminado resultando un híbrido a medio camino entre las prisas compradoras de las reuniones del pasado jueves y el profundo desánimo que caracterizó los primeros pasos del ciclo.Los últimos fines de semana están resultando muy contradictorios para los mercados de valores, y los inversores no parecen muy proclives a afrontar los riesgos que representa comprar títulos de renta variable en viernes.

Con todo, las reuniones ofrecieron un discreto balance positivo, como consecuencia de la escasa actividad de los vendedores, quienes tampoco parecían estar mu...

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El cierre bursátil de la semana ha terminado resultando un híbrido a medio camino entre las prisas compradoras de las reuniones del pasado jueves y el profundo desánimo que caracterizó los primeros pasos del ciclo.Los últimos fines de semana están resultando muy contradictorios para los mercados de valores, y los inversores no parecen muy proclives a afrontar los riesgos que representa comprar títulos de renta variable en viernes.

Con todo, las reuniones ofrecieron un discreto balance positivo, como consecuencia de la escasa actividad de los vendedores, quienes tampoco parecían estar muy interesados en forzar bajas de consideración materializando sus partidas.

Esta situación dio origen a un importante descenso en la animación, que se podía apreciar en los corros. Presumiblemente, el volumen de negocio habrá sufrido un recorte en relación a la sesión precedente.

Una de las curiosidades de la mañana la constituyó la exacta repetición sobre su valor anterior que presentaba el índice de bancos comerciales en el mercado madrileño.

En este sector abundaron, como es lógico, las repeticiones, y el valor más destacado resultó el Popular, que ganaba cuatro enteros, alejándose de esta forma de la cota del 200%, para lo que utilizaba los 5.564 títulos de saldo comprador con que contaba, según la caja.

El resto de sus compañeros ofrecían saldos discretamente vendedores, que totalizaban 33.970 títulos. La mayor parte correspondía a Banesto con 22.283 acciones, aunque sólo Hispano aceptaba recortar un punto el precio de sus títulos.

Entre los especialistas existe la impresión de que en este sector se está librando una batalla sorda por impedir que las cotizaciones rebasen por su extremo inferior la citada cota del 200%. Para ello, se refieren a extremos tales como la elevada contratación que se produjo ayer, y que concretamente representó 530 millones de pesetas efectivas en la Bolsa madrileña, cifra bastante superior a lo que aparentemente se daba a conocer durante la propia sesión a través de sus particulares mecanismos de contratación.

La conclusión a la que se llega es que se está contratando con bastante fluidez por fuera de los circuitos del mercado, por lo que los saldos que aparecen podrían no resultar demasiado significativos.

En definitiva, muchos especialistas bursátiles han llegado a la conclusión, después de constatar lo dicho anteriormente, de que algunos fontaneros bancarios están dedicándose a parar las órdenes vendedoras de sus acciones antes de que éstas sean procesadas por el ordenador del mercado.

El otro extremo destacable de la reunión lo constituyeron las importantes alzas que se registraron en el sector cementero y de construcción.

La mayor parte de las empresas incluidas en este grupo reflejaban unas subidas importantes que se justificaban en el hecho de que ya existen dos ampliaciones de capital anunciadas, concretamente la de Valenciana de Cementos, que se realizará a partir del día 22 próximo, en la proporción de cinco acciones por cada diecisiete antiguas sin ningún tipo de desembolso, y Cementos Alba, que hará una por dos, también gratis, a partir del próximo primero de marzo.

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