Del Opus Dei y buen jugador de mus

Transcurrido el período de vacaciones, en el que mis actividades como promotor del Partido Liberal aparecían en su periódico sin complementos informativos, ha vuelto al trabajo su corresponsal en Bilbao, Patxo Unzueta, y he vuelto yo a ser citado con la etiqueta de "activo (sic) miembro del Opus Dei".Dado que el celo informativo de su corresponsal le hace empeñarse en incluir mi vida privada en sus informaciones políticas, voy a ayudarle para que no resulte siempre reiterativo: también soy miembro de la sociedad bilbaína, de la AEP, de la asociación holandesa de Prensa Neewspoort, del I...

Transcurrido el período de vacaciones, en el que mis actividades como promotor del Partido Liberal aparecían en su periódico sin complementos informativos, ha vuelto al trabajo su corresponsal en Bilbao, Patxo Unzueta, y he vuelto yo a ser citado con la etiqueta de "activo (sic) miembro del Opus Dei".Dado que el celo informativo de su corresponsal le hace empeñarse en incluir mi vida privada en sus informaciones políticas, voy a ayudarle para que no resulte siempre reiterativo: también soy miembro de la sociedad bilbaína, de la AEP, de la asociación holandesa de Prensa Neewspoort, del Instituto, Salvador de Madariaga y de algunas otras entidades culturales, soy un regular jugador de tenis, bastante bueno de mus, vivo en una casa alquilada y no conduzco, soy asimismo socio de un despacho de asesoramiento en comercio exterior y consejero-delegado de una empresa transitaria. Todas estas actividades tienen tanto que ver con la política como el ser del Opus Dei, es decir, nada. Mis decisiones políticas las tomo libremente y sólo yo soy responsable de las mismas.

En relación a las declaraciones del señor Arzalluz al diario nacionalista Deía, que su corresponsal cita, quiero aclararle que he escrito una carta al citado diario, que aún no ha publicado, en la que indico que el señor Arzallus miente al decir que se encontró con Antonio Garrigues, miente al afirmar que allí estaba el señor Beitia, miente al relacionar a los liberales vascos con las divisiones de su partido (en las que muestra una manía persecutoria preocupante), se equivoca al relacionar al señor Busturia con el Partivo Liberal Vasco, se equivoca al definir la opción política de mi partido y yerra hasta en las fechas que cita. Todo un ejemplo de la concreción y claridad de su trayectoria política./

Portavoz del Partido Liberal Vasco.