Se mantiene la subida del oro

El incremento del precio del oro se ha mantenido en la semana que ahora termina como consecuencia de la caída en los tipos de interés y la baja del dólar en los mercados internacionales. El proceso de descenso en los tipo de interés, iniciado en el mes de julio, prosigue, y el del dólar se ha colocado en el 10,67% y 11,45%, para tres y seis meses respectivamente. En el resto de las monedas de los países industrializados la reducción de los tipos también es general, salvo en el caso francés, donde la divisa se encuentra sometida a fuertes tensiones, a pesar de los últimos logros en contención d...

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El incremento del precio del oro se ha mantenido en la semana que ahora termina como consecuencia de la caída en los tipos de interés y la baja del dólar en los mercados internacionales. El proceso de descenso en los tipo de interés, iniciado en el mes de julio, prosigue, y el del dólar se ha colocado en el 10,67% y 11,45%, para tres y seis meses respectivamente. En el resto de las monedas de los países industrializados la reducción de los tipos también es general, salvo en el caso francés, donde la divisa se encuentra sometida a fuertes tensiones, a pesar de los últimos logros en contención de la tasa de inflación.Hasta el jueves, la situación en el sector financiero se mantuvo ambigua, con un dólar oscilante al que acompañaban tanto el oro como la plata. Pero en ese día, y cuando se supo que una importante compañía norteamericana de suministros para la construcción suspendía pagos, los metales preciosos recibieron un primer impulso alcista. Los rumores sobre la posible quiebra de un banco holandés, en el que uno de los principales bancos de Nueva York tiene un 30% de participación, ayudó a esta fuerte subida en los precios del oro. Como colofón, la noticia de importantes compras de un destacado cliente de Oriente Medio. Al final de la sesión, la Reserva Federal bajaba en medio punto su tipo de descuento, dejándolo en el 10%.

Las bolsas internacionales, especialmente la de Nueva York, han tenido esta semana importantes alzas, consecuencia de la decisión de la Administración Reagan de dar marcha atrás en su política de recortes de impuestos. Hasta la sesión del jueves, el alza fue imparable.

Los expertos consideraban que el aumento de operaciones -en la sesión del jueves se superó en la Bolsa de Nueva York la cifra de contratación de cien millones de títulos por cuarta vez en poco tiempo- era el principal exponente de la nueva tendencia bursátil. En esa jornada se negociaron 139 millones, que supone un nuevo récord para la historia de la bolsa. Todo ello antes de que se supiera que la Reserva Federal procedería a una nueva reducción en el tipo de descuento. La reacción en los demás países no se hizo esperar y los cuatro bancos ingleses que integran el sistema de banca delegada redujeron en medio punto el tipo de interés básico para sus operaciones crediticias, dejándolo en el 10,5%. En las sesiones del viernes, las cosas volvieron a su cauce, reafirmándose el dólar y perdiendo los metales preciosos casi todas su ganancias del día anterior.

Resulta fácil comprender la zozobra en la que viven los especialistas en los mercados financieros internacionales durante las últimas jornadas. El mercado se mueve errático en busca de nuevos puntos de referencia. Según el testimonio de los expertos, de mantenerse la actual coyuntura, el oro irá cobrando más realce como valor de referencia. Sin embargo, las posibilidadeis de beneficios fáciles vienen dadas por los dientes de sierra que se están produciendo en los mercados de valores.

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