Amplia redada policial contra la comunidad de extranjeros de la isla de la Gomera

Una localidad de la isla de la Gomera, Valle Gran Rey, en la que viven alrededor de tres mil personas, ha sido escenario de una amplia operación policial, motivada por las quejas de los vecinos ante lo que califican de actos incívicos y antisociales por parte de la numerosa colonia de extranjeros que reside temporalmente cada año en el municipio.La detención de un austríaco y dos alemanes por tenencia ilícita de un revólver, posesión de drogas e indocumentación, junto a la propuesta de expulsión de otros ocho extranjeros en situación ilegal, ha sido el balance de dicha actuación policial, en l...

Una localidad de la isla de la Gomera, Valle Gran Rey, en la que viven alrededor de tres mil personas, ha sido escenario de una amplia operación policial, motivada por las quejas de los vecinos ante lo que califican de actos incívicos y antisociales por parte de la numerosa colonia de extranjeros que reside temporalmente cada año en el municipio.La detención de un austríaco y dos alemanes por tenencia ilícita de un revólver, posesión de drogas e indocumentación, junto a la propuesta de expulsión de otros ocho extranjeros en situación ilegal, ha sido el balance de dicha actuación policial, en la que fueron identificadas 150 personas de distintas nacionalidades por miembros de la Jefatura Superior de Policía y de la Guardia Civil.

Desde hace unos cinco años, este municipio viene siendo lugar de descanso, especialmente en época invernal, de jóvenes turistas europeos, que han llegado a crear una población flotante de cerca de 600 personas, cifra importante para el pequeño municipio, entre cuyos habitantes se ha extendido la impresión de que los extranjeros se adueñan del pueblo e imponen sus costumbres.

El Gobierno Civil tomará medidas severas

En una nota oficial hecha pública por el Gobierno Civil de la provincia, se anuncia que serán tomadas medidas rigurosas para garatizar la seguridad y reprimir el tráfico de drogas, "cortando de raíz toda conducta antisocial que venga a ser origen de perturbación en la forma habitual de vida de los vecinos de núcleos que, por su tranquilidad, son foco de atracción para extranjeros".El alcalde, Esteban Betencour, señaló a EL PAIS que "el pueblo ha insistido en la necesidad de contar con un cuartel de la Guardia Civil y diariamente desaprueba el comportamiento de esta gente, al contrario de lo que ocurre con otra clase de extranjeros, que se han quedado a vivir entre nosotros, integrándose". Anteriormente, la alcaldía había hecho público un bando desautorizando el desnudismo en las playas del municipio.