Tribuna:

Los dividendos bancarios centran la atención de los inversores

Los mercados de valores nacionales continuaron apuntando una marcada tendencia alcista basada, exactamente igual que en las últimas reuniones, en la pujanza de las empresas eléctricas de segunda fila, y en el interés que vienen mostrando los mentores de los valores bancarios para que no se interrumpa la racha positiva de los valores sometidos a su tutela.La excepción la constituyó el Banco de Santander, cuyos representantes pusieron a la venta, según diversos especialistas, el suficiente número de títulos como para contrarrestar el volumen comprador con el que contaba a primera hora de la maña...

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Los mercados de valores nacionales continuaron apuntando una marcada tendencia alcista basada, exactamente igual que en las últimas reuniones, en la pujanza de las empresas eléctricas de segunda fila, y en el interés que vienen mostrando los mentores de los valores bancarios para que no se interrumpa la racha positiva de los valores sometidos a su tutela.La excepción la constituyó el Banco de Santander, cuyos representantes pusieron a la venta, según diversos especialistas, el suficiente número de títulos como para contrarrestar el volumen comprador con el que contaba a primera hora de la mañana, y que algunos operadores cifraban en cerca de 90.000 acciones.

Aparte de esta pequeña novedad, el mercado no apuntó caracteres originales, y se limitó a seguir una senda que parece previamente trazada. Después de cerrado el período hábil para operar, se observaba una creciente presencia de vendedores, principalmente de acciones bancarias, cuyo origen se establecía en los operadores a corto que ya comienzan a dar por buenas las plusvalías acumuladas en las últimas reuniones.

La situación de abundante liquidez en la que se encuentran los principales inversores institucionales hace prever un futuro menos malo del que se esperaba para las bolsas, sobre todo cuando ya comienzan a ser conocidos los dividendos a cuenta del pasado ejercicio que pagarán los bancos el próximo día 26 de enero. Según casi todas las versiones, ese día el Banesto pagará 22,39 pesetas brutas, el Hispano 42, el Bilbao 42,26, el Vizcaya 102, y el Santander 22. Por su parte, el Popular pagará 46 pesetas el 1 de febrero próximo.

Todas estas derramas parecen respetar la primera recomendación del Banco de España al sector, en el sentido de que los dividendos bancarios no superen, a lo largo del presente ejercicio, el 8% de los recursos propios medios (suma de capital y reservas).

Lo que ya no está tan claro es que todas las entidades vayan a respetar la segunda recomendación del banco emisor y sus pay-outs, esto es, la parte de los resultados que destinen a retribuir a sus accionistas, no superen el 50%. Más de una de las grandes entidades del sector rebasará este porcentaje si finalmente decide llevar sus dividendos al 8%.

Los inversores se mostraron complacidos a lo largo de toda la mañana por los rumores que se iban generando en torno a los pagos de estos dividendos, y aunque la rentabilidad de estos valores por la vía simple del dividendo aún dista mucho de los tipos de interés a que se paga el dinero en el mercado financiero, lo cierto es que representa una subida sustancial en relación a los pagados en años anteriores, y en el caso concreto del Banco de Vizcaya, que según distintas versiones pagará con cargo a 1981 unas 157 pesetas brutas, ya se queda en las inmediaciones de los precios medios del dinero.

En el capítulo de ampliaciones de capital, en estos momentos se dan como seguros los desdobles, en la proporción de una acción nueva por cada diez antiguas, del Central y el Hispano que ya las tenían comprometidas, mientras que el Popular, de quien también se comenta que realizará una ampliación de capital, no aparece tan clara la proporción, si bien se especula con la posibilidad de que sea similar a las anteriores.

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