Oposición griega a que la OTAN exprese su "alegría" por el ingreso de España

Por primera vez en su historia, el eurogrupo (ministros de Defensa de los países europeos miembros de la Alianza Atlántica, exceptuados Francia e Islandia) fue incapaz ayer de ponerse de acuerdo para hacer público un comunicado final. La causa ha sido España: un grupo de países, encabezados por la República Federal de Alemania, quería incluir un párrafo expresando la «alegría» del eurogrupo por la futura adhesión de España y su deseo de que el proceso de integración «se realice lo más rápidamente posible».

Pero Grecia, representada sólo a nivel de embajador, se opuso tajantemente. Hoy v...

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Por primera vez en su historia, el eurogrupo (ministros de Defensa de los países europeos miembros de la Alianza Atlántica, exceptuados Francia e Islandia) fue incapaz ayer de ponerse de acuerdo para hacer público un comunicado final. La causa ha sido España: un grupo de países, encabezados por la República Federal de Alemania, quería incluir un párrafo expresando la «alegría» del eurogrupo por la futura adhesión de España y su deseo de que el proceso de integración «se realice lo más rápidamente posible».

Pero Grecia, representada sólo a nivel de embajador, se opuso tajantemente. Hoy volverá a reunirse el eurogrupo, esta vez con asistencia del ministro de Defensa griego, Andreas Papandreu (que es también primer ministro). A última hora de la noche de ayer parecía que Atenas aceptará una mención «más escueta», en la que no se hable del ritmo del proceso de integración.La posición definitiva de Grecia -que no se opone a la adhesión de España, pero que plantea sucesivos «inconvenientes » de procedimiento- podría quedar resuelta en el caso de que los contactos entre el Gobierno de Papandreu y la Administración Reagan lleguen a algún tipo de acuerdo sobre la ayuda militar que recibirá Atenas en su pugna constante con otro país de la OTAN, Turquía, que es su «enemigo histórico».

Hasta el momento parece como si Papandreu utilizara en esta negociacióncon Norteamérica todas las cartas a su alcance, entre ellas la de «incomodar» el proceso de integración de España, vehementemente deseado por Washington. El líder griego puede pensar que es más fácil negociar con Estados Unidos la situación de las bases estadounidenses en Grecia cuando todavía no existe un acuerdo entre España y Norteamérica para las bases de utilización conjunta hispano-norteamericana.

Normalmente, los ministros de Defensa europeos no incluyen en su comunicado final ningún aspecto de tipo político. Pero en esa ocasión, Bonn, apoyado por otros países, estimó que procedía dar una bienvenida calurosa a los españoles. De acuerdo con lo previsto, los ministros de Asuntos Exteriores de los quince firmarán el próximo jueves el protocolo de adhesión de nuestro país, a falta de la ratificación parlamentaria o gubernativa que se exige en cada país aliado. Pero el embajador griego, Stelios Valsamas -Andreas Papandreu no llegó a Bruselas hasta pasadas las cinco de la tarde-, señaló que no era procedente, y de nada sirvieron los intentos por convencerle, que duraron más de una hora.

Holanda no se opone a la mención

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Algunos rumores señalaron que los Países Bajos mantenían una actitud similar, pero un portavoz oficioso de toda solvencia indicó a EL PAIS que el Gobierno de La Haya no se oponía en absoluto a la inclusión del párrafo sobre España.

Papandreu, que se entrevistó ayer con el secretario de Defensa norteamericano, Caspar Weinberger, puede desbloquear hoy la situación, aceptando una mención «escueta». Según algunos observadores, el líder socialista griego explicará su posición sobre la ampliación de la Alianza en una reunión «restringida» (es decir, sólo los ministros, sin consejeros ni intérpretes) que tendrá lugar hoy, en el marco del Comité de Planes de Defensa. En todo caso, es seguro que el ministro de Asuntos Exteriores, lonnis Haralambopulos, firmará, con todos sus colegas y en presencia del ministro español, José Pedro Pérez-Llorca, el protocolo de adhesión, firma que deberá ser después ratificada en el Parlamento de Atenas.

Finalmente, hay que recordar que en los Países Bajos el Parlamento dedicó hace unos días prácticamente toda una sesión extraordinaria de debates para discutir la ampliación de la Alianza. El debate partió de dos mociones presentadas por dos pequeños partidos (el Radical y el Pacifista, con tan sólo una representación parlamentaria de tres escaños cada uno), pero dio pie al portavoz del partido socialista, que forma parte del Gobierno, para reiterar, una vez más, que el problema no ha hecho más que empezar, que el acto del día 10 no implica ningún compromiso final y que su grupo parlamentario hará todo lo posible para impedir la adhesión de España a la Organización del Tratado para el Atlántico Norte (OTAN). El mencionado portavoz oficioso aclaró la postura del Gobierno de La Haya al respecto.

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