La ejecutiva de UCD desaprueba las tesis de la Plataforma Moderada

El Comité Ejecutivo de Unión de Centro Democrático (UCD), reunido ayer durante seis horas en un hotel madrileño para debatir la situación interna del partido, acordó redactar un documento a través del cual se desaprueban las líneas programáticas de la llamada carta de los 39 o Plataforma Moderada, en cuya redacción participaron destacados dirigentes del sector crítico, principalmenle democristianos. El citado texto fue aprobado por la mayoría de los miembros de la ejecutiva centrista, a excepción de Miguel Herrero y Emilio Attard, ambos firmantes de la citada carta, que se...

El Comité Ejecutivo de Unión de Centro Democrático (UCD), reunido ayer durante seis horas en un hotel madrileño para debatir la situación interna del partido, acordó redactar un documento a través del cual se desaprueban las líneas programáticas de la llamada carta de los 39 o Plataforma Moderada, en cuya redacción participaron destacados dirigentes del sector crítico, principalmenle democristianos. El citado texto fue aprobado por la mayoría de los miembros de la ejecutiva centrista, a excepción de Miguel Herrero y Emilio Attard, ambos firmantes de la citada carta, que se abstuvieron, y en él se hace una advertencia contra quienes formen «grupos o fracciones organizadas dentro del partido».El comunicado de UCD, en el que se desaprueba el documento de la Plataforma Moderada, dice que, después de un amplio debate, la dirección del partido ha decidido «lamentar el procedimiento utilizado, que ha supuesto dar a la publicidad temas que, por su naturaleza y efectos, deben sustanciarse previamente mediante debate interno en los órganos correspondientes del partido».

Asimismo manifiesta que «el documento en cuestión, por sus insuficiencias y contradicciones, recoge sólo de manera parcial la ideología de UCID, que es un auténtico partido de centro, reformista y progresista» y resalta «la incoherencia de la petición de un programa de acción política que atienda las prioridades de gobierno cinco meses después de haber votado afirmativamente el programa del actual presidente, expuesto en el acto de investidura y en el que se establecen tales prioridades».

Por último, el comunicado oficial del partido recuerda que « UCD, en sus estatutos, defiende y respeta dentro y fuera de su seno la libertad de expresión, de pensamiento, de conciencia, de reunión, y establece que los conflictos internos del partido, cualquiera que sea su naturaleza, y especialmente aquellos que puedan dañar su imagen, deberán sustanciarse mediante debate interno. Igalmente no se permite la existencia de grupos o fracciones organizadas dentro del partido».

La mayoría de las horas que duró la reunión de la ejecutiva centrista sus miembros estuvieron discutiendo el contenido del documento de la Plataforma Moderada. Sólo dos de los componentes de la dirección del partido, el portavoz del grupo parlamentario, Miguel Herrero, y el centrista valenciano Emilio Attard, ambos firmantes del escrito, defendieron las tesis del documento, todo ello frente a una mayoría que -acordó censurarlo y advertir, tal corno indica la nota oficial al final, que no se permite dentro de la organización la existencia de «grupos o fracciones organizadas», términos empleados, de alguna forma, para evitar la palabra tendencia.

Miguel Herrero, con cara de circunstancias, abandonó la reunión pocos minutos antes de que terminara, manifestando a los periodistas que no quería hacer declaraciones, con objeto de evitar tensiones. Sin embargo, el resto de suscomparierosde la ejecutiva, entre ellos el ex presidente del Gobierno y de UCD, Adolfo Suárez, salía sonriente.

En un principio se comentó que el documento, así como sus firmantes, podrían pasar por el comité de disciplina del partido, circunstancia que calificó de «exagerada» a EL PAIS un dirigente centrista próximo a Martín Villa, y que posteriormente aclararía el portavoz de UCD, Juan Díez Nicolás, diciendo que el tema era de «discusión política y no disciplinaria».

En la reunión estuvo durante unas horas el presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, ya que se trasladó, avanzada la tarde, a los locales del Ateneo, para asistir al acto celebrado en memoria del ex ministro y ex dirigente liberal de UCD, ya fallecido, Joaquín Garrigues. Adolfo Suárez, que intervino en varias ocasiones en la reunión, mantuvo un encuentro previo a esta reunión con el presidente y secretario general del partido, Agustín Rodríguez Sahagún y Rafael Calvo Ortega, respectivamente.