Juicio contra los presuntos asesinos del magistrado Cruz Cuenca

Ante la Audiencia Nacional se celebró ayer el juicio seguido contra seis presuntos miembros de los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO), acusados del asesinato del magistrado presidente de la Sala Sexta del Tribunal Supremo, Miguel Cruz Cuenca, informa Europa Press.En sus conclusiones provisionales, el fiscal señala que, en diciembre de 1978, José María Sánchez-Casas ordenó que fuera «ejecutado» el presidente de la Sala Sexta del Tribunal Supremo, Miguel Cruz Cuenca. Previamente encargó a Antonio Tosina García, Isabel Aparicio Sánchez y Celsa Barcia Vallejo que realiza...

Ante la Audiencia Nacional se celebró ayer el juicio seguido contra seis presuntos miembros de los Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre (GRAPO), acusados del asesinato del magistrado presidente de la Sala Sexta del Tribunal Supremo, Miguel Cruz Cuenca, informa Europa Press.En sus conclusiones provisionales, el fiscal señala que, en diciembre de 1978, José María Sánchez-Casas ordenó que fuera «ejecutado» el presidente de la Sala Sexta del Tribunal Supremo, Miguel Cruz Cuenca. Previamente encargó a Antonio Tosina García, Isabel Aparicio Sánchez y Celsa Barcia Vallejo que realizaran informes sobre las costumbres de Cruz Cuenca. Una vez contrastados los informes, encargó la realización del atentado al jefe del comando de los GRAPO, Adolfo Caballero Carbonell.

El 9 de enero de 1978 -continúa el fiscal-, Adolfo Caballero, Ana María Sánchez Fuertes y Raúl Calero Arcones, ya fallecido, robaron un coche a punta de pistola, y con él se trasladaron a las inmediaciones del docimilio de Cruz Cuenca, en la calle de Felipe II, de Madrid. Cuando el magistrado salía de su casa, Adolfo Caballero se acercó a él y le disparó por la espalda. A continuación huyó en el automóvil robado que esperaba en doble fila, conducido por Ana María Sánchez Fuertes.

Por estos hechos, el fiscal pidió para Sánchez Casas la pena de treinta años, por asesinato; para Adolfo Caballero, 38 años, por asesinato, utilización ilegítima de vehículo a motor y tenencia ilícita de armas; para Ana María Sánchez Fuertes, dieciocho años, por asesinato y tres años por utilización ilegítima de vehículo a motor, y para Tosina, Ceisa Barcia e Isabel Aparicio, la pena de doce años y un día por complicidad en asesinato.

En el interrogatorio, Sánchez-Casas manifestó que, en la fecha de suceder los hechos, él era el jefe de los GRAPO y que dio orden de que «ejecutasen» a Cruz Cuenca, pero que no la dio a ninguno de los que se hallaban en la sala.

Adolfo Caballero negó su participación en los hechos y Ana María Sánchez Fuertes dijo que condujo el coche, pero que desconocía lo que hubieran hecho previamente sus compañeros. El resto de los acusados negó también su participación en los hechos. Antonio Tosina, en el momento del interrogatorio, aludió a la situación de las cárceles, por lo que fue expulsado de la sala.

El Juicio fue suspendido en la prueba testifical, ya que tres de los testigos solicitados por el ministerio fiscal no comparecieron. El juicio se reanudará el día 18.

Condenados cuatro etarras

Cuatro miembros de un comando de ETA Militar fueron condenados ayer por la Audiencia Nacional por delito de estragos contra una joyería de Bilbao, propiedad de un miembro del Cuerpo Superior de Policía, en diciembre de 1978, informa Efe.El escrito de la sentencia declara probado que el jefe del comando, Juan Carlos Yurrebaso Atucha, y sus componentes, José María Zuazo Olozaga, José Ramón Sarachaga Alvaro y José Luis Asensio Artaraz, resolvieron causar destrozos, mediante un artefacto explosivo, en la joyería mencionada.