Paros en Hunosa para presionar sobre la reestructuración de la empresa

Hunosa parará los próximos días 19,20,27 y 28, según acordaron los sindicatos Comisiones Obreras y SOMA-UGT en una reunión celebrada en la tarde de ayer. Las asociaciones profesionales, que también estuvieron presentes, decidieron abrir un compás de espera. Por otra parte, existe igualmente una convocatoria de huelga en Ensidesa para los días 19, 20, 21 y 22, con la intención de desbloquear las negociaciones sobre la reestructuración del sector siderúrgico.La convocatoria de huelga en Hunosa, que los días 27 y 28 irá acompañada de marchas y manifestaciones, responde al deseo de los sindicatos ...

Hunosa parará los próximos días 19,20,27 y 28, según acordaron los sindicatos Comisiones Obreras y SOMA-UGT en una reunión celebrada en la tarde de ayer. Las asociaciones profesionales, que también estuvieron presentes, decidieron abrir un compás de espera. Por otra parte, existe igualmente una convocatoria de huelga en Ensidesa para los días 19, 20, 21 y 22, con la intención de desbloquear las negociaciones sobre la reestructuración del sector siderúrgico.La convocatoria de huelga en Hunosa, que los días 27 y 28 irá acompañada de marchas y manifestaciones, responde al deseo de los sindicatos de iniciar cuanto antes las conversaciones para reestructurar la empresa nacional hullera sobre las siguientes bases: participación del Consejo Regional de Asturias, interlocutores válidos, revocación del anuncio de cierre del pozo Barredo, inicio de las deliberaciones del convenio colectivo o adelanto provisional y a cuenta, como condiciones previas a la apertura de negociaciones en tomo a temas relacionados con todas las actividades empresariales, objetivos de producción, inversiones, mecanización, productividad, absentismo, seguridad, formación, hábitat, diversificación industrial, estructura organizativa y participación de los trabajadores.

Dichas negociaciones no han dado comienzo porque la Administración aún no ha concretado los objetivos para Hunosa durante los próximos tres años. Industria pretende fijar unas pérdidas máximas por tonelada de carbón arrancada, de forma que los pozos que superen esos topes serían cerrados en 1983, año en el que se intenta reducir las subvenciones totales a Hunosa hasta 16.000 millones de pesetas para homologar sus pérdidas a las que se producen en la minería europea.