El presidente informa a los militares de Ceuta sobre Euskadi
La visita iniciada ayer por el presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, a Ceuta, con una población castrense de 12.000 personas, y que se prolongará esta noche a Melilla (el presidente ha abierto un paréntesis en el programa para estar presente hoy, en Lisboa, en los funerales por Sa Carneiro), está siendo interpretada como una preparación del comprometido viaje que tiene previsto realizar la semana entrante a las tres provincias vascas.El presidente del Gobierno mantuvo un coloquio de hora y media de duración con una amplia representación de mandos militares destacados en la plaza, en el curso...
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La visita iniciada ayer por el presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, a Ceuta, con una población castrense de 12.000 personas, y que se prolongará esta noche a Melilla (el presidente ha abierto un paréntesis en el programa para estar presente hoy, en Lisboa, en los funerales por Sa Carneiro), está siendo interpretada como una preparación del comprometido viaje que tiene previsto realizar la semana entrante a las tres provincias vascas.El presidente del Gobierno mantuvo un coloquio de hora y media de duración con una amplia representación de mandos militares destacados en la plaza, en el curso del cual dijo, entre otras cosas, que «no podemos emplear las mismas armas que ETA, pues nos convertiríamos en unos asesinos como ellos».
En breves encuentros posteriores con los periodistas, tanto Suárez como el capitán general de la IV Región Militar (Sevilla), teniente general Merry Gordon, precisaron que, a lo largo del coloquio, se abordaron temas preocupantes, como la crisis económica, terrorismo y la reforma de las Fuerzas Armadas mediante disposiciones legales sometidas al Parlamento, cómo es la próxima creación de la reserva militar activa.
El presidente del Gobierno, cuya visita a la plaza estuvo alternada de actos políticos y castrenses (entre estos últimos, la visita al Tercio Duque de Alba de la Legión), aclaró ante los militares que la españolidad de Ceuta y Melilla queda fuera de cualquier duda en la Constitución.
Página 11