El Consejo General alerta a los médicos sobre una posible huelga

, Juan Manuel Junceda Avello, presidente del Colegio Oficial de Médicos de Asturias, remitió a todos los colegiados un escrito del Consejo General de Colegios de Médicos relativo a la ética profesional y la huelga médica, como preparación de posibles acciones que en el futuro puedan adoptarse por la organización médica colegial. La introducción del Consejo General de Colegios de Médicos afirma que los contactos mantenidos con los responsables de la Administración, ponen de manifiesto que las posibilidades de obtener unas mínimas respuesta, aceptables son muy difíciles en vía de la razón y de l...

, Juan Manuel Junceda Avello, presidente del Colegio Oficial de Médicos de Asturias, remitió a todos los colegiados un escrito del Consejo General de Colegios de Médicos relativo a la ética profesional y la huelga médica, como preparación de posibles acciones que en el futuro puedan adoptarse por la organización médica colegial. La introducción del Consejo General de Colegios de Médicos afirma que los contactos mantenidos con los responsables de la Administración, ponen de manifiesto que las posibilidades de obtener unas mínimas respuesta, aceptables son muy difíciles en vía de la razón y de la negociación, por lo que es detener la necesidad de recurrir a medidas de fuerza.

Paciencia y ética

También invoca que la permanente y prolongada incoherencia e insensibilidad de la Administración para los problemas médicos asistenciales alcanza cotas que sobrepasan no la paciencia, sino las obligaciones éticas de la profesión médica. Argumenta que pretender negar el derecho de huelga a los médicos en todo momento y circunstancia en base a su responsabilidad ética es condenar al médico a una heroicidad perpetua, «ni valorada ni reconocida por la sociedad». El escrito del consejo general trata de mentalizar a todo el cuerpo médico asalariado para lanzarse a una huelga en el momento oportuno; expone que el tema de las incompatibilidades podría ser el detonante y enumera los pasos que deben preceder a la convocatoria: agotar todas las posibilidades de negociación, negarse a realizar funciones burocráticas administrativas como forma de presión y una perfecta planificación y organización del desarrollo del paro, así como fijar el tiempo de su duración, que deberá ser, forzosamente, limitado.