Juzgados cuatro presuntos miembros de ETA

Ante la Sección Primera de la Audiencia Nacional se celebró ayer el juicio seguido contra los presuntos miembros de ETA José María Juaristi Gabilondo, Manuel Beraza Celones, Juan Ignacio, Oñaederra Egaña y Ana María Macías Duque.Según informa Europa Press, el fiscal solicitó para Juaristi y Beraza, diecisiete años de prisión; para Oñaederra, catorce años, y para Ana María Macías, siete años. En su escrito de conclusiones provisionales, el ministerio público señala que en diciembre de 1979 los procesados constituyeron una célula armada de ETA y asistieron a cursillos de entrenamiento en el sur ...

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Ante la Sección Primera de la Audiencia Nacional se celebró ayer el juicio seguido contra los presuntos miembros de ETA José María Juaristi Gabilondo, Manuel Beraza Celones, Juan Ignacio, Oñaederra Egaña y Ana María Macías Duque.Según informa Europa Press, el fiscal solicitó para Juaristi y Beraza, diecisiete años de prisión; para Oñaederra, catorce años, y para Ana María Macías, siete años. En su escrito de conclusiones provisionales, el ministerio público señala que en diciembre de 1979 los procesados constituyeron una célula armada de ETA y asistieron a cursillos de entrenamiento en el sur de Francia. Ana María Macías era la encargada de llevar a Francia los mensajes.

En el mismo mes, tras regresar de Francia, Juaristi y Beraza -sigue el fiscal- recibieron armamento de ETA, consistente en una metralleta, cuatro pistolas y tres granadas de fabricación casera, previsto para, atentar contra miembros de las Fuerzas de Orden Público. En enero de 1980 los dos citados forzaron la puerta de una caseta en la cantera Aperribai, en Deva (Guipúzcoa), apoderándose de 38 detonadores y varios rollos de cable. El grupo, a excepción de Ana María Macías, tenía previsto atentar contra el taxista de El góibar Amable Granados, de quien suponían que era confidente de la policía. El atentado, previsto para el 18 de enero, no fue llevado a cabo porque la policía detuvo antes a los procesados.

Nada más entrar en la sala del juicio, los tres comenzaron a dar gritos a favor de ETA, siendo coreados por algunos asistentes del público (en su mayoría de origen vasco). Tanto el público como los procesados fueron expulsados de la sala por esta falta de respelo al tribunal, a excepción de Ana María Macías, que no había gritado. Esta negó todas las imputaciones

El fiscal pidió subsidiariamente para Ana María Macías la pena de un año y un día de prisión por un delito de colaboración con bandas armadas. Los defensores pidieron la libre absolución.

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