UCD consigue el apoyo del 70% de los ayuntamientos de Almería a la vía del 144

Los alcaldes y concejales de Unión de Centro Democrático (UCD) de Almería, que controlan más del 70% de las corporaciones locales de la provincia, acordaron ayer, en una asamblea, ratificar su adhesión a la vía del artículo 144 de la Constitución por considerarle el camino válido para desbloquear el proceso autonómico andaluz.

Este acuerdo, adoptado en una multitudinaria reunión celebrada en un cine de Almería, supuso un reforzamiento de las mociones aprobadas el viernes por la mayoría de los municipios almerienses para apoyar la vía del 144. Horas antes de la asamblea centrista, la Dip...

Los alcaldes y concejales de Unión de Centro Democrático (UCD) de Almería, que controlan más del 70% de las corporaciones locales de la provincia, acordaron ayer, en una asamblea, ratificar su adhesión a la vía del artículo 144 de la Constitución por considerarle el camino válido para desbloquear el proceso autonómico andaluz.

Este acuerdo, adoptado en una multitudinaria reunión celebrada en un cine de Almería, supuso un reforzamiento de las mociones aprobadas el viernes por la mayoría de los municipios almerienses para apoyar la vía del 144. Horas antes de la asamblea centrista, la Diputación almeriense había aprobado otra moción en el mismo sentido.La moción asumida por la diputación fue aprobada por catorce votos a favor y ocho en contra, correspondientes los afirmativos a los diputados de UCD, y los negativos, a los representantes del PSOE. Nada más iniciarse el pleno, el portavoz socialista, Antonio Maresca, calificó la sesión de ilegal por haber sido convocada a raíz de la presentación de una moción por un solo diputado y estar establecido en la ley de Régimen Local que sólo se puede convocar sesión extraordinaria cuando lo solicite un tercio de los miembros de la corporación.

El presidente, José Fernández Revuelta (UCD), apeló al artículo 294/ 1.1 de la misma ley por el que se faculta al presidente a convocar sesiones extraordinarias. La moción fue aprobada y, en la explicación de voto, el portavoz socialista afirmó que, además de la ilegalidad de la convocatoria, su grupo no apoyaba la moción porque no estaba de acuerdo con ninguno de los puntos que se proponían, y afirmó que el único objeto de la misma es «desprestigiar a la Junta de Andalucía». En relación con este tema, EL PAIS ha podido saber de fuentes socialistas que es muy posible que se presente un recurso contencioso-administrativo solicitando la anulación del acuerdo.

Por aclamación

Por otra parte, una vez finalizado el pleno, los diputados, senadores, alcaldes y concejales de UCD -en total unas seiscientas personas- se reunieron en un cine de la capital en el que se celebró una asamblea, y en la que se aprobó, por aclamación, otra moción en idénticos términos a la aprobada por la diputación. En este acto intervino el diputado centrista Francisco Soler, quien afirmó que la repetición del referéndum en Almería sentaría un grave precedente, y citó como ejemplo el hecho de que si se celebrase un referéndum en Navarra y perdiesen los partidarios de la integración de esta provincia en Euskadi, «la coalición Herri Batasuna podría pedir que se repitiese la consulta; por eso», añadió, «la repetición del referéndum en Almería es un tema en el que no vamos a transigir».

Escuredo, conciliador

Paralelamente, el presidente de la Junta de Andalucía, Rafael Escuredo, manifestó, en el transcurso de una conferencia de Prensa celebrada ayer en Almería, que la multiplicidad de actos que se han celebrado o se van a celebrar durante este fin de semana en esta capital no es una batalla entre los diferentes partidos políticos andaluces, «porque todos tienen derecho a convocar».En relación con la integración de Almería al proceso autonómico andaluz, Escuredo considera que el problema no está todavía clarificado y que la Junta no admitirá ninguna discriminación para Almería: «La única salida que existe para solucionar los actuales problemas es la negociación política». Por lo que respecta a las diferentes posturas mantenidas hasta ahora por los partidos andaluces, anunció que si la actual política de confrontación se mantiene, «el tema puede acabar en el Tribunal de Garantías Constitucionales ».