Denuncia de presuntas prácticas antisindicales en la factoría de Citroën Hispania

Iniciado en los primeros días de junio pasado, en la Delegación Provincial de Trabajo de Vigo se encuentra todavía abierto un expediente sobre presuntas prácticas antisindicales, represión y coacciones contra los sindicatos de clase en la factoría viguesa de Citroën-Hispania.

La investigación que ha iniciado la Inspección provincial de Trabajo se debe a una denuncia presentada con la firma del presidente y del secretario del comité de empresa, en la que se alude a la actividad de mandos intermedios y a una sistemática política coactiva de la dirección.La Inspección de Trabajo ha tom...

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Iniciado en los primeros días de junio pasado, en la Delegación Provincial de Trabajo de Vigo se encuentra todavía abierto un expediente sobre presuntas prácticas antisindicales, represión y coacciones contra los sindicatos de clase en la factoría viguesa de Citroën-Hispania.

La investigación que ha iniciado la Inspección provincial de Trabajo se debe a una denuncia presentada con la firma del presidente y del secretario del comité de empresa, en la que se alude a la actividad de mandos intermedios y a una sistemática política coactiva de la dirección.La Inspección de Trabajo ha tomado contacto con representantes de la dirección de Citroën y con los sindicatos para avanzar en la investigación que, pese a ello, está todavía en una primera fase.

Interpelación parlamentaria comunista

Los problemas relacionados con la actividad sindical en la empresa, reiteradamente planteados por los sindicatos, habían provocado ya una interpelación parlamentaria del Grupo Comunista en el Congreso de los Diputados. Los sindicatos acusan a la empresa de coacciones y represión contra los trabajadores más reivindicativos, ejercidas a través de los mandos intermedios afiliados al recientemente creado Sindicato Independiente de Trabajadores de Citroën (SITC), formado a partir de la antigua sección sindical de la CGDT, que se negó a fusionarse con USO. Aquel sindicato había conseguido una escasa mayoría de votos sobre UGT en las elecciones de 1978, y cuenta con el mismo número de delegados, trece, que la central socialista, a las que sigue, con diez, CC OO en el comité de empresa.

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