El socialista Rodríguez Doreste fue elegido anoche nuevo alcalde de Las Palmas

Por veinte votos a favor y nueve en contra -éstos correspondientes a los concejales de la Unión del Pueblo Canario (UPC)- fue elegido anoche el nuevo alcalde de Las Palmas, Juan Rodríguez Doreste, miembro del Partido Socialista Canario-PSOE, y en torno al cual se han agrupado la mayoría de las fuerzas presentes en la corporación grancanaria, tras el descalabro de la mayoría de izquierdas, capitaneada hasta aquel momento por Manuel Bermejo Pérez, de la UPC.

Los votos favorables corrieron a cargo de UCD (catorce), del PSOE (cuatro; tres más uno del propio alcalde), uno del Partido Republi...

Por veinte votos a favor y nueve en contra -éstos correspondientes a los concejales de la Unión del Pueblo Canario (UPC)- fue elegido anoche el nuevo alcalde de Las Palmas, Juan Rodríguez Doreste, miembro del Partido Socialista Canario-PSOE, y en torno al cual se han agrupado la mayoría de las fuerzas presentes en la corporación grancanaria, tras el descalabro de la mayoría de izquierdas, capitaneada hasta aquel momento por Manuel Bermejo Pérez, de la UPC.

Los votos favorables corrieron a cargo de UCD (catorce), del PSOE (cuatro; tres más uno del propio alcalde), uno del Partido Republicano Federal (PRF) y otro de Acción Vecinal (AV). Todos ellos dieron el sí a Juan Rodríguez Doreste, tras intensas y prolongadas negociaciones, que culminaron en las primeras horas de la tarde de ayer.De esta forma, la Unión del Pueblo Canario se ha convertido en oposición, y contará, a partir de ahora, con sólo nueve votos, y no diez, al registrarse la baja de la coalición nacionalista del representante del PRF Gutiérrez Peña.

«Han sido unas negociaciones duras, fatigosas y prolongadas», declaró a EL PAIS el secretario insular del PSOE, Carmelo Artiles Bolaños, tras llegarse al acuerdo definitivo con AV, en la fase final de las conversaciones. «Se ha impuesto el sentido común y todas las fuerzas han aceptado la realidad: la de restaurar la normalidad en el ayuntamiento de la octava ciudad de España», añadió Artiles Bolaños.

Aunque el partido socialista tenía ganada la alcaldía con los votos de los centristas y del PRF, se luchaba sin embargo por la mayoría de los dos tercios y por una mayoría gobernante «socialista, competente y eficaz», según palabras del secretario insular del PSOE. Poco antes de las cuatro de la tarde, los representantes de la agrupación independiente de AV decían sí a la última propuesta. Concejalía de Cultura y Festejos, presencia en la comisión municipal permanente y responsabilidad sobre el distrito de Escaleritas. En definitiva, la alcaldía ha prometido al concejal de AV su apoyo a su programa.

El acuerdo municipal pactado en Madrid levantó acaloradas discusiones en el transcurso de una reunión celebrada en la madrugada de ayer por el comité insular del PSOE de Gran Canaria, pacto rechazado por un sector del mismo. Sometido a votación el asunto que se debatía -coalición con UCD-AV y PRF-, sesenta dijeron sí,- veinte, no, y el resto se abstuvo. Sin embargo, se pudo saber que el criterio era unánime en que Juan Rodríguez Doreste aceptase la alcaldía.

Los socialistas han valorado positivamente el gesto de UCD, «con una política de responsabilidad, que, a pesar de su talante ideológico, no ha dudado en darnos la alcaldía». Por ello, los centristas han tenido que pasar a segundo plano. En cuanto a la Unión del Pueblo Canario, a juicio del secretario insular socialista, «ellos se han excluido de las negociaciones, debido a su concepción sobre el gobierno no municipal». La UPC, según quedó demostrado en el pleno extraordinario de anoche, pasará a tener un papel de oposición radical.

Por último, hay que destacar que la actual mayoría de gobierno desea evitar a toda costa los errores del pasado y consolidar un gobierno estable y duradero.

Gritos de "traidores"

Al término de la sesión municipal, que duró media hora, el nuevo alcalde manifestó que accedía al cargo sin alegría y «por necesidad». Aseguró que en la nueva mayoría, cada partido coaligado «conservará su rostro propio». Añadió que no sería «un rehén de UCD» y basó su programa de actuación al frente del ayuntamiento en la autoridad, sobriedad en los gastos y la armonía.Al intentar tomar la palabra los concejales nacionalistas, y negársela el nuevo alcalde, se produjo un enfrentamiento verbal. En la calle, varios centenares de militantes de UPC profirieron gritos de «traidores» contra UCD y PSOE.