Orientación positiva de los tres mercados

Ha terminado la semana en los tres mercados de valores nacionales, con sesiones discretamente orientadas al alza, en las que la escasez de órdenes de uno y otro signo ha vuelto a permitir la intervención desahogada de los especialistas, que han sido quienes, en definitiva, han generado la mayor parte de las diferencias positivas.El denominador común de la actividad en los parqués, ayer por la mañana, fue la prisa por terminar las operaciones y salir con destino a los lugares de vacaciones donde disfrutar de este largo fin de semana.

El sector bancario resultó el más afectado, por la pen...

Ha terminado la semana en los tres mercados de valores nacionales, con sesiones discretamente orientadas al alza, en las que la escasez de órdenes de uno y otro signo ha vuelto a permitir la intervención desahogada de los especialistas, que han sido quienes, en definitiva, han generado la mayor parte de las diferencias positivas.El denominador común de la actividad en los parqués, ayer por la mañana, fue la prisa por terminar las operaciones y salir con destino a los lugares de vacaciones donde disfrutar de este largo fin de semana.

El sector bancario resultó el más afectado, por la penuria de órdenes. La oferta global para el conjunto de los «siete grandes» superaba escasamente los 4.000 títulos. Banesto presentaba unas 3.000 acciones a la compra, mientras el saldo comprador del otro banco que tenía saldos tomadores, el Popular, rondaba los mil títulos. Sólo esta última entidad optaba por mejorar un punto su cotización, mientras que los demás preferían las cómodas repeticiones.

Bastantes asistentes a la sesión en Madrid comentaban, extrañados, la escasa beligerancia que están mostrando los valores de este sector, quienes, a pesar de lo exiguo del papel que a diario se les genera, y en contra de su costumbre, no muestran gran interés por mejorar sus cambios.

El índice madrileño, por segundo día consecutivo, se colocó en el máximo valor anual.