Murió el escultor, italiano Marino Marini, "el último figurativo de Occidente"

El escultor italiano Marino Marini falleció ayer en Milán, a los 79 años. Fue uno de los grandes artistas occidentales y su prestigio fue corroborado en todo el mundo con multitud de premios de carácter internacional. En España tuvo una importante influencia a partir de los años cincuenta, cuando fue expuesta en Madrid parte de su obra, como recuerda en el perfil que sigue el catedrático de Historia del Arte Antonio Bonet Correa. Marino Marini estaba considerado como «el último escultor figurativo de Occidente», aunque su obra tuvo, además, otros muchos registros.

Desaparecido no hace m...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

El escultor italiano Marino Marini falleció ayer en Milán, a los 79 años. Fue uno de los grandes artistas occidentales y su prestigio fue corroborado en todo el mundo con multitud de premios de carácter internacional. En España tuvo una importante influencia a partir de los años cincuenta, cuando fue expuesta en Madrid parte de su obra, como recuerda en el perfil que sigue el catedrático de Historia del Arte Antonio Bonet Correa. Marino Marini estaba considerado como «el último escultor figurativo de Occidente», aunque su obra tuvo, además, otros muchos registros.

Desaparecido no hace mucho Giorgio de Chirico, con la muerte de Marino Marini Italia pierde otro de sus grandes artistas más conocidos fuera de sus fronteras.Nacido en Pistola, en 1910, Marini, que se formó en Florencia y París, fue un escultor de marcada personalidad, con una temática propia y muy reconocible.

Famoso sobre todo por sus diferentes, pero muy similares, versiones de la imagen ecuestre de Hombre a caballo, Marini fue un plástico de gran concentración formal y obsesiva e insistente representación de la figura humana, del animal, ya unidos o por separado.

Escultor que aprende en su antecesor, Medardo Rosso (1858-1928), el desprecio de la técnica académica, poniendo todo el acento en la vitalidad expresiva de las superficies tensas de los cuerpos, Marini, desde un primer momento, comprendió las limitaciones de la escultura clásica, o más bien neoclásica y barroca.

Recogiendo la lección del futurismo, pero sin caer en la tentación de ser su continuador, Marini, como Máximo Campigli en la pintura, busca su mundo en las reminiscencias arcaicas o preclásicas, en especial las del arte etrusco.

Autor de esculturas figurativas -se ha llegado a decir que las últimas de Occidente-, sus personajes tienen mucho de muñecos hinchados o recosidos, como si se tratase de peleles de tela o muñecos recompuestos.

Muy de señalar es que sus obras no son de gran tamaño, sino más bien de formatos relativamente pequeños. Sin embargo, esto no les quita grandeza. Más bien, la obra de Marini tiene una monumentalidad rara en nuestra época. Quizá el no utilizar tamaños o escalas naturales es lo que crea ese distintivo casi de ídolo primitivo y arcaico, como si participase de un sentido eterno.

Influencia en España

Marino Marini, al que no hay que confundir con el escultor, también italiano, Arturo Martini (1889-1947), autor de figuras en terracota, muy manieristas, influyó, lo mismo que su casi homónimo, poderosísimamente en el arte español de la posguerra. La exposición de arte italiano celebrada en Madrid en los años cincuenta dio a conocer su obra, que, al igual que la de Campigli produjo gran impacto en los jóvenes artistas españoles de entonces, la acción que frente al arte académico Manni había producido en Italia por sus formas desnudas, su poder de concentración y extrema sensibilidad, volvió a tener efectividad entre los artistas españoles que querían romper con las envaradas lecciones aprendidas en las escuelas de Bellas Artes.La fuerza intensa y apretada de la obra de Marino enlazaba con un concepto cultural -muy mediterráneo-, que en la España de aquellos años podía ser muy bien comprendido y aceptado como una auténtica liberación, a la vez que como una posibilidad plástica verdaderamente creadora.

Archivado En