Cuatro muertos y cinco heridos en una nueva oleada de violencia en el País Vasco

Cuatro muertos y cinco heridos es el balance del violento fin de semana registrado en el País Vasco. El más importante de los atentados, llevado a cabo presumiblemente por ETA Militar, costó la vida a dos guardías civiles y heridas a otros tres, además de la muerte de dos miembros del comando agresor; asimismo, un matrimonio francés resultó herido al estallar una bomba en su coche, y otros tres automóviles más de matrícula francesa fueron destrozados por explosiones de distintos artefactos. Estos sucesos siguen al incendio de la Universidad de Navarra, registrado el sábado pasado en Pamplona....

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Cuatro muertos y cinco heridos es el balance del violento fin de semana registrado en el País Vasco. El más importante de los atentados, llevado a cabo presumiblemente por ETA Militar, costó la vida a dos guardías civiles y heridas a otros tres, además de la muerte de dos miembros del comando agresor; asimismo, un matrimonio francés resultó herido al estallar una bomba en su coche, y otros tres automóviles más de matrícula francesa fueron destrozados por explosiones de distintos artefactos. Estos sucesos siguen al incendio de la Universidad de Navarra, registrado el sábado pasado en Pamplona.

El atentado contra los guardias civiles se llevó a cabo en las proximidades de Orio (Guipúzcoa), y fue una emboscada a fuerzas antiterroristas de las Unidades de Acción Rural (UAR), en que los automóviles policiales fueron ametrallados por el fuego cruzado de terroristas situados a ambos lados de la carretera. Algunos de los agentes lograron disparar contra el comando, abatiendo a dos de sus miembros.Estos últimos han sido identificados como Ignacio María Gabilondo y Carlos Alberto Lucio Fernández. Según datos facilitados por fuentes próximas al Ministerio del Interior, el primero de ellos era miembro liberado de ETA Militar y tenía un amplio historial delictivo; se le atribuye la asistencia a cursillos de adiestramiento terrorista en Francia, Souma (Argelia) y en un campamento del Frente Popular para la Liberación de Palestina situado en Yemen del Sur. En cuanto al segundo, Carlos Alberto Lucio Fernández, se le considera también míembro de ETA Militar, integrante de un «comando legal» de la misma, natural de Ribadeo (Lugo) y con domicilio en Portugalete, de donde huyó en junio de 1979.

Siempre según las citadas fuentes, ambos terroristas estaban implicados, entre otras muchas acciones, en la colocación de un artefacto explosivo en la central nuclear de Lemóniz, que causó la muerte de un trabajador, en junio de 1979, además del secuestro del industrial Berazadi.

En cuanto a las bombas que destrozaron cuatro automóviles franceses, se especula con la posibilidad de que sea una represalia del Batallón Vasco Español.

Paralelamente al desarrollo de estos sucesos, en una localidad cercana a Bayona, situada en el País Vasco francés, se celebró un mitin antiterrorista con asistencia del presidente de la Internacional Socialista, Willy Brandt, y del líder del Partido Socialista francés, Francois Mitterrand.

Páginas 11 y 12

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