Tienen que conectar las mangueras a los grifos de la casa para sofocar un incendio
Un aparatoso incendio se produjo hacia las 21.15 horas de ayer en el piso veintiuno de un edificio de apartamentos situado en el número 32 de la calle del General Perón. No se produjeron víctimas a pesar de que los bomberos encontraron grandes dificultades para conectar sus mangueras. El edificio, de veinticinco plantas, tiene 376 apartamentos y en él viven cerca de un millar de personas.Los bomberos madrileños se encontraron con que no había extintores en los pasillos y no funcionaba la columna seca, que permite tomar agua en los edificios altos. El inmueble tampoco está dotado de esca...
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Un aparatoso incendio se produjo hacia las 21.15 horas de ayer en el piso veintiuno de un edificio de apartamentos situado en el número 32 de la calle del General Perón. No se produjeron víctimas a pesar de que los bomberos encontraron grandes dificultades para conectar sus mangueras. El edificio, de veinticinco plantas, tiene 376 apartamentos y en él viven cerca de un millar de personas.Los bomberos madrileños se encontraron con que no había extintores en los pasillos y no funcionaba la columna seca, que permite tomar agua en los edificios altos. El inmueble tampoco está dotado de escalera de incendios.
Las mangueras tuvieron que ser conectadas finalmente a los grifos del propio apartamento siniestrado. El incendio en ningún momento afectó a otras plantas del inmueble, pese a que el intenso humo que salía por las ventanas hizo cundir la alarma en la zona.
Si el fuego hubiese adquirido grandes proporciones probablemente los bomberos no hubieran tenido posibilidades de combatirlo con éxito, ya que las conducciones domésticas no ofrecen la presión suficiente y la escala con la que cuentan -una de las más altas de europa- tiene cincuenta metros, lo que sólo permitía llegar hasta la planta decimoséptima.
Las causas del siniestro no han sido determinadas con exactitud, aunque se especulaba anoche con la posibilidad de que tuviera su origen en una imprudencia de un niño de tres años, hijo del matrimonio propietario del apartamento incendiado.