Tribuna:

La lógica en la Bolsa

Era lógico imaginar que tras las, realizaciones de beneficios que se iniciaron a finales de la pasada semana, y que alcanzaron su máxima expresión en la sesión de apertura de la que hoy termina, las aguas volvieran a su cauce, y los Bancos continuasen con su andadura alcista.Razones por parte del mercado existían muy pocas, pues los compradores continuaban sin decidirse a fijar sus posturas, mientras los vendedores aprovechaban la menor ocasión para poner sus títulos en el mercado. Pero, en cambio, existía algo que resultaba casi más importante, y era la manifiesta decisión por parte de las en...

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Era lógico imaginar que tras las, realizaciones de beneficios que se iniciaron a finales de la pasada semana, y que alcanzaron su máxima expresión en la sesión de apertura de la que hoy termina, las aguas volvieran a su cauce, y los Bancos continuasen con su andadura alcista.Razones por parte del mercado existían muy pocas, pues los compradores continuaban sin decidirse a fijar sus posturas, mientras los vendedores aprovechaban la menor ocasión para poner sus títulos en el mercado. Pero, en cambio, existía algo que resultaba casi más importante, y era la manifiesta decisión por parte de las entidades de este grupo de mantener e incluso incrementar las mejoras en sus precios. Los buenos resultados que presentarán en sus juntas de accionistas, y los incrementos en sus dividendos, que previsiblemente anunciarán para mejorar su rentabilidad bursátil, ya que por el momento la posibilidad de realizar ampliaciones de capital no parece cautivarles (el ejemplo del Vizcaya elevando sus dividendos hasta 80,41 pesetas netas resulta suficientemente ilustrativo), eran las razones esgrimidas por los mentores de los distintos Bancos para justificar tan favorable evolución. Con todo, y ser la lógica uno de los valores más en baja en nuestro mercado, en esta ocasión se impuso y los valores bancarios protagonizaron en la segunda mitad del ciclo un remonte espectacular.

Tan espectacular (Santander a 270 % y Popular 207 %) que la sombra de las realizaciones de beneficios volvió a planear sobre el parquet al cierre del viernes. No obstante, y cuando se trata de Bancos, siempre hay una seguridad, y es que al final siempre ocurrirá lo que ellos quieran.

Las eléctricas estáticas continuaron convertidas en valores refugio para los rentistas, y no presentaron en ningún momento atractivos suficientes a corto.

De sectores como Alimentación, Construcción, Inversión o Varios hace ya mucho tiempo que casi nadie se acuerda. Y como las Químicas flojean a diario y se mueven sólo a impulsos de los operadores especializados y tampoco los «hierros» presentan mayores atractivos, desasistidos hasta de la intervención de los arbitrajistas, hemos llegado a un mercado de renta variable que aparece claramente dividido en dos sectores: los Bancos y los demás.

Por último, señalar dos rectificaciones publicadas en el Boletín de la Bolsa de Madrid, y pendientes de confirmar. La negociación de Petróleos el día 26 de los corrientes fue de 504 millones de pesetas (un millón de acciones aproximadamente) frente a los poco más de cinco millones inicialmente publicados, mientras la otra modificación correspondía a Dragados, y en lugar de 2,38 millones, el miércoles negociaron 252.

El «mercadillo» de letras ha perdido parte de su interés con la ausencia de Banesto. Entre martes y jueves se contrataron en Madrid poco más de sesenta millones de pesetas, menos de la mitad de lo que se hacía cuando aquél participaba, y lo que sí se comentó fue la reducción en los tipos de descuento practicados: 12,5 % para los efectos de 500.000 pesetas y el 13 % para los demás, siempre emitidos a un año. La novedad la supuso el inicio de las operaciones en efectos comerciales en, Barcelona. En el mercado catalán se cruzaron 14 letras de la Banque Nationale de París y del Barclay's Bank, oscilando los tipos entre el 12,75 % y el 13 %.

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