Tribuna:

Necesita el triunfo

La última actuación brillante del Atlético de Madrid en torneos europeos, aunque con la derrota ante el Bayern. en el estrambote de la final de Bruselas, se caracterizó por el sufrimiento constante de sus seguidores en el Vicente Calderón. Salvo el día del Celtic, el resto de los encuentros fueron serios disgustos; la satisfacción plena se produjo en campo contrario. Aun en esta ocasión, el Atlético hizo gala de una irregularidad sin par.Los seguidores rojiblancos, habituados a tales trances, han sido todo un ejemplo de lo que es ser inasequible al desaliento. Sorprende, por tanto, que en la p...

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La última actuación brillante del Atlético de Madrid en torneos europeos, aunque con la derrota ante el Bayern. en el estrambote de la final de Bruselas, se caracterizó por el sufrimiento constante de sus seguidores en el Vicente Calderón. Salvo el día del Celtic, el resto de los encuentros fueron serios disgustos; la satisfacción plena se produjo en campo contrario. Aun en esta ocasión, el Atlético hizo gala de una irregularidad sin par.Los seguidores rojiblancos, habituados a tales trances, han sido todo un ejemplo de lo que es ser inasequible al desaliento. Sorprende, por tanto, que en la presente campaña, ante la primera derrota en casa, hayan reaccionado con indiferencia de cara al partido de esta noche.

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El Atlético ha sido siempre capaz de lograr un resultado feliz en el momento en que más decaído se le ha considerado. Apostar, por tanto, a la derrota frente al Dynamo de Dresde es más que arriesgado. El adversario de esta noche es peligroso porque realiza un fútbol rudo, pero práctico. Más que la filigrana, a los alemanes democráticos les interesa el funcionamiento uniforme de la máquiria. Eso fue lo que llevó a su selección nacional a triunfar en Hamburgo, en el Mundial de 1974, frente a Alemania Federal.

El encuentro primero del torneo europeo tiene a priori varios alicientes. Y el más importante quizá radica en la necesidad que tienen los colchoneros de rehabilitarse. Para olvidar lo del Spórting nada más idóneo que un triunfo europeo.

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