Cartas al director

Aborto, sí; aborto, no

Cierto es lo que el señor Fernández Atares plantea en su tribuna libre del 13 de julio. Toda persona -hombre o mujer- es un proyecto y cada hombre o mujer «tenemos que inventar nuestra vida». Por ello, precisamente por ello, muchas mujeres -yo, como tal, también- reclamamos el derecho al aborto.Porque es nuestro cuerpo el que se hinchará durante nueve meses, porque, hoy por hoy, nuestra es la responsabilidad del cuidado de los hijos. Porque durante doce semanas (casos excepcionales aparte) el feto es incapaz de vivir fuera de nuestro cuerpo, por tanto forma parte de él, y las mujeres «t...

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Cierto es lo que el señor Fernández Atares plantea en su tribuna libre del 13 de julio. Toda persona -hombre o mujer- es un proyecto y cada hombre o mujer «tenemos que inventar nuestra vida». Por ello, precisamente por ello, muchas mujeres -yo, como tal, también- reclamamos el derecho al aborto.Porque es nuestro cuerpo el que se hinchará durante nueve meses, porque, hoy por hoy, nuestra es la responsabilidad del cuidado de los hijos. Porque durante doce semanas (casos excepcionales aparte) el feto es incapaz de vivir fuera de nuestro cuerpo, por tanto forma parte de él, y las mujeres «tenemos que inventar nuestra vida». Porque queremos una maternidad responsable y consciente, para que el mundo sea habitado por personas -hombres y mujeres- más libres, más felices. Porque las mujeres no somos máquinas de parir.

Pero el señor Fernández Atares debe saber que la cuestión no es tan sencilla como «legalización - del -derecho - al - aborto - porque - es -un - hecho - que - se - da». Esta reivindicación va unida a otras muchas que nos pondrán en el camino de la emancipación, para que algún día -¡ojalá no lejano!- hombres y mujeres nos relacionemos de igual a igual.

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