Tribuna:

Discriminaciones históricas

La Asamblea del Fútbol español vive anclada en el pasado, en cuanto a algunas de sus normas se refiere. Al fútbol, o quizá mejor, a sus hombres, le fue bien el status que le permitió la Secretaría General del Movimiento, y esa tolerancia pretende perpetuarla. La asamblea se reúne para dialogar y votar, pero sucede que la mayoría de los temas han sido apañados con anterioridad, y ocurre que, a la hora de votar, se mantiene la absurda teoría de que los presidentes del Madrid, Barcelona, Valencia, Atlético de Madrid y Athlétic de Bilbao valen veinticinco votos más que el del Spórting, Las Palmas ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La Asamblea del Fútbol español vive anclada en el pasado, en cuanto a algunas de sus normas se refiere. Al fútbol, o quizá mejor, a sus hombres, le fue bien el status que le permitió la Secretaría General del Movimiento, y esa tolerancia pretende perpetuarla. La asamblea se reúne para dialogar y votar, pero sucede que la mayoría de los temas han sido apañados con anterioridad, y ocurre que, a la hora de votar, se mantiene la absurda teoría de que los presidentes del Madrid, Barcelona, Valencia, Atlético de Madrid y Athlétic de Bilbao valen veinticinco votos más que el del Spórting, Las Palmas o Real Sociedad.Solamente se vislumbra una discusión seria en el pleno de hoy: la transmisión de los partidos por televisión. Los segundones, que hasta hace unos años dependían en todo de lo que opinasen los grandes, tienen ahora la sartén por el mango, porque pueden votar sobre el tema televisivo.

Más información

Habría que preguntarse, antes de entrar en la discusión, si el capricho de los clubs de Tercera puede ser norma de obligado cumplimiento para los de Primera.

Los privilegios deben desaparecer, pero bueno sería que los asambleístas rompieran con las discriminaciones reales existentes. El Real Unión de Irún, en Tercera, pesa quince votos más que todos los demás miembros de la categoría, y ello gracias a los méritos de René Petit, que es tanto como si Coalición Democrática valiera por quince diputados más si se anotara los méritos de Sánchez de Toca.

Archivado En