Años de retraso

Con años de retraso, la asamblea del fútbol español ha decidido someter a debate algunos de los temas más trascendentales de su organización. La razón última de la decisión hay que buscarla en la huelga del pasado mes de marzo. Federación y clubs no han respondido a la corriente de los tiempos y ni siquiera a la postura lógica por la que debían inclinarse tras repetidas sentencias judiciales.Pablo Porta, que es hábil manejador de la asamblea, ya ha resuelto previamente la mayoría de las cuestiones espinosas. En la electoral, que, en definitiva, le proporciona los votos para aprobar cuantos tem...

Con años de retraso, la asamblea del fútbol español ha decidido someter a debate algunos de los temas más trascendentales de su organización. La razón última de la decisión hay que buscarla en la huelga del pasado mes de marzo. Federación y clubs no han respondido a la corriente de los tiempos y ni siquiera a la postura lógica por la que debían inclinarse tras repetidas sentencias judiciales.Pablo Porta, que es hábil manejador de la asamblea, ya ha resuelto previamente la mayoría de las cuestiones espinosas. En la electoral, que, en definitiva, le proporciona los votos para aprobar cuantos temas son de su agrado, ha logrado una curiosa quiniela. Por las federaciones regionales hay dos plazas para directivos nacionales y sólo dos candidatos: los suyos. Para las tres plazas de representantes de los clubs de Primera hay también tres candidatos, o sea, sus amigos. Para los dos puestos de Segunda División hay cuatro aspirantes, lo que da tono de lucha electoral y espíritu democrático. Da lo mismo, porque también hay algún amiguete bien colocado.

Estos señores de la asamblea, para darse algún pote, han incluido en el orden del día la creación de una comisión de estudio del proyecto de ley de educación física. El proyecto de ley de la cultura fisica y el deporte ya está en las Cortes, lo que viene a significar que bien poco pueden aportar los señores del fútbol al tema. Taurinamente, lo que van a hacer es componer la figura cuando ya han pasado los pitones.