Cartas al director

Desinformación nuclear

A veces observo cómo hay personas que basan principalmente sus teorías en una opinión escuchada a medias de un charlatán con vocabulario resonante y agresivo. Pongamos por ejemplo a esos que, con divulgar por las calles aquello de «¿Nuclear? No, gracias», ya tienen una masa a sus pies y chillando lo mismo. Yo me pregunto: ¿cuántos conocen a fondo el tema? ¿Cuántos tienen, aunque sea, una idea acertada de lo que es una central nuclear?Sí, todos sabemos que eso es una instalación donde suponemos que se destruye el medio ambiente. Sabemos lo de los residuos radiactivos, sí, y también lo del accid...

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A veces observo cómo hay personas que basan principalmente sus teorías en una opinión escuchada a medias de un charlatán con vocabulario resonante y agresivo. Pongamos por ejemplo a esos que, con divulgar por las calles aquello de «¿Nuclear? No, gracias», ya tienen una masa a sus pies y chillando lo mismo. Yo me pregunto: ¿cuántos conocen a fondo el tema? ¿Cuántos tienen, aunque sea, una idea acertada de lo que es una central nuclear?Sí, todos sabemos que eso es una instalación donde suponemos que se destruye el medio ambiente. Sabemos lo de los residuos radiactivos, sí, y también lo del accidente de Harrisburg... Y todos nos hemos indignado por los titulares sensacionalistas de la burbuja de hidrógeno.

Venga, señores, ¿qué se apuestan a que dentro de poco ya tenemos referéndum para el sí o el no a las centrales?

Sólo falta adivinar el resultado. Total, salga lo que salga, una mayoría, como siempre, apenas sabrá de qué va la cosa.

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