Hoy quedará normalizado en Madrid el reparto de butano

Los repartidores de butano de Madrid se reincorporarán esta mañana a sus puestos y normalizarán el servicio si se cumplen los acuerdos a que se llegó en la reunión mantenida el pasado martes con distribuidores, Butano, SA y el delegado de Industria.Estos acuerdos suponen un incremento de 9,50 pesetas por bombona: siete de ellas cuando los huelguistas se incorporen al trabajo y las 2,50 restantes a partir del próximo 15 de julio, ambas con efecto retroactivo desde el 1 de enero. Los distribuidores abonarán también a los repartidores cinco pesetas por bombona vendida entre el 1 de octubre y el 3...

Los repartidores de butano de Madrid se reincorporarán esta mañana a sus puestos y normalizarán el servicio si se cumplen los acuerdos a que se llegó en la reunión mantenida el pasado martes con distribuidores, Butano, SA y el delegado de Industria.Estos acuerdos suponen un incremento de 9,50 pesetas por bombona: siete de ellas cuando los huelguistas se incorporen al trabajo y las 2,50 restantes a partir del próximo 15 de julio, ambas con efecto retroactivo desde el 1 de enero. Los distribuidores abonarán también a los repartidores cinco pesetas por bombona vendida entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre del año pasado. Los reunidos acordaron, al margen de estos aspectos económicos, el descanso de los repartidores los sábados por la tarde, (toda la jornada entre el 15 de mayo y el 15 de diciembre), readmisión de despedidos y anulación de sanciones, y la creación de una comisión que estudie otra fórmula de pago de las bombonas, para que no sea en metálico.

El tema que más preocupa a los huelguistas es el de los despidos. Al parecer, el distribuidor Dibucrae, de Alcorcón, había manifestado su intención de no readmitir a los de su empresa, motivo por el que los repartidores -según han declarado a EL PAIS- estarían dispuestos a no abandonar el conflicto. Recuerda en este sentido la CSUT que, según lo pactado, los acuerdos son vinculantes sin excepción para todas las empresas distribuidoras y, por tanto, condición indispensable para la vuelta a la normalidad.

La huelga de repartidores de butano se inició en Madrid el pasado 22 de enero, en demanda de aumento en las comisiones por bombona vendida. Durante todo el conflicto, el Gobierno Civil, la empresa y el Ayuntamiento establecieron entre sesenta y ochenta puntos de venta (según los días), atendidos por el personal de plantilla de las distribuidoras y protegidos por las fuerzas de orden público. Gracias a este plan de emergencia, en ningún momento hubo desabastecimiento en la provincia aunque se ocasionaron a los consumidores las lógicas molestias.

El Gobierno Civil ha impuesto multas de 50.000 a 250.000 pesetas a ocho distribuidoras por incumplimiento de este plan de emergencia; y multas a 36 trabajadores por su participación en piquetes y en una manifestación ante el edificio de RTVE, en Prado del Rey, (entre ellos se encuentra Manuel Fernández, miembro del comité federal de la CSUT y candidato al Congreso por el PTE).

Las huelgas que mantienen los repartidores de butano de Barcelona, Valencia, Valladolid y León también podrían finalizar en las próximas horas. Todas ellas están pendientes de negociación y será importante, de cara a un acuerdo final, la marcha de los acontecimientos de Madrid.