Cerca de doscientos extranjeros en prisiones españolas, pendientes de expulsión

Cerca de doscientos súbditos extranjeros se encuentran internados en centros penitenciarios españoles, a la espera únicamente de ser expulsados del territorio nacional, expulsión que en algunos casos se retrasa varios meses por trámites burocráticos, según datos recogidos por Efe.El estar meses en la cárcel esperando ser expulsado del país es una situación demasiado frecuente, informan abogados penalistas, lo que produce en ellos una situación de inseguridad, sobre todo teniendo en cuenta que la mayoría no conoce a nadie y no sabe expresarse en nuestro idioma.

En la cárcel de Car...

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Cerca de doscientos súbditos extranjeros se encuentran internados en centros penitenciarios españoles, a la espera únicamente de ser expulsados del territorio nacional, expulsión que en algunos casos se retrasa varios meses por trámites burocráticos, según datos recogidos por Efe.El estar meses en la cárcel esperando ser expulsado del país es una situación demasiado frecuente, informan abogados penalistas, lo que produce en ellos una situación de inseguridad, sobre todo teniendo en cuenta que la mayoría no conoce a nadie y no sabe expresarse en nuestro idioma.

En la cárcel de Carabanchel había a primeros de este mes un tunecino, que ingresó en el mes de marzo; un portugués y un colombiano desde mayo; otro portugués desde julio, y desde septiembre un peruano, un portugués, un colombiano y un cubano, todos ellos pendientes solamente de ser expulsados.

La Dirección General de Seguridad (DGS), a cuya disposición están los extranjeros pendientes de expulsión, ha precisado a Efe que las causas de que se prolongue su estancia en prisión se deben fundamentalmente a dos razones: que el extranjero se halle indocumentado y la falta de medios para pagarse el viaje a su país.

En el primer caso -indocumentación- es necesario tramitar una documentación a través del consulado o embajada de su país, dependiendo entonces su estancia en prisión del tiempo que las representaciones diplomáticas o consulares tarden en efectuarlo. A veces se plantea el problema -dice la DGS- de determinar su verdadera nacionalidad, lo que alarga aún más los trámites.

En cuanto a la falta de medios para pagarse el viaje a su país, es necesario en este caso recabarlo de la representación diplomática o consular respectiva.

La mayoría de los súbditos extranjeros actualmente en prisión son de países del norte de Africa y suramericanos: hay veinticinco argelinos; 38 marroquíes, veinte portugueses, diecisiete franceses, catorce alemanes y 39 latinoamericanos, dieciséis de ellos colombianos. Los reclusos extranjeros en trámite de expulsión reciben en las cárceles el mismo tratamiento que los españoles, a excepción de una gran limitación de los permisos de salida.

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