Atraco de veinte millones en la localidad guipuzcoana de Escoriaza
Dos jóvenes armados consiguieron llevarse ayer a las cuatro y media de la tarde más de veinte millones de pesetas de la sucursal que la Caja Laboral Popular tiene en la localidad guipuzcoana de Escoriaza. Cuatro horas antes, en la vecina localidad de Mondragón, dos personas, probablemente las mismas que cometieron el atraco, habían interceptado un vehículo que más tarde se utilizaría para la acción.
La conductora, una mujer, fue obligada a dirigirse al alto de Campazar, donde los asaltantes desistieron de maniatarla, como era su intención, al verla muy nerviosa y al haberles asegurado é...
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Dos jóvenes armados consiguieron llevarse ayer a las cuatro y media de la tarde más de veinte millones de pesetas de la sucursal que la Caja Laboral Popular tiene en la localidad guipuzcoana de Escoriaza. Cuatro horas antes, en la vecina localidad de Mondragón, dos personas, probablemente las mismas que cometieron el atraco, habían interceptado un vehículo que más tarde se utilizaría para la acción.
La conductora, una mujer, fue obligada a dirigirse al alto de Campazar, donde los asaltantes desistieron de maniatarla, como era su intención, al verla muy nerviosa y al haberles asegurado ésta que cumpliría las órdenes de no dar parte a la policía hasta las cinco de la tarde.En el Ford Fiesta, matrícula SS-8406-J, los atracadores se dirigieron a Escoriaza, y a las tres menos cuarto de la tarde abordaron en plena calle al director de la entidad bancaria que se dirigía a su casa, obligándole a introducirse en el automóvil donde, al parecer, se encontraban otras dos personas, que le condujeron hasta las oficinas de la entidad.
Una vez en el interior del edificio, el director de la Caja Laboral Popular informó a sus acompañantes que la caja fuerte no podría abrirse, porque tenía conectado un mecanismo aplicado a un reloj para la apertura programada, que estaba establecida a las cuatro y media de la tarde. Los atracadores, al parecer, no pusieron ninguna objeción y esperaron tranquilamente.