Puede desaparecer un centro para recuperación de drogadictos

Un taller de artesanía que daría trabajo a ocho jóvenes drogadictos en período de recuperación no puede funcionar porque la Unión Española de Defensa contra la Droga, entidad privada patrocinadora del proyecto, no dispone de 77.000 pesetas, cantidad adeudada por el alquiler del local de los últimos siete meses.Según la nota de prensa de la citada entidad, «la Administración como tal ha dado muestras de una lamentable falta de sensibilidad hacia estos temas, aunque a nivel personal algunas personas que ocupan altos cargos en la burocracia administrativa, incluyendo un magistrado de Peligrosidad...

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Un taller de artesanía que daría trabajo a ocho jóvenes drogadictos en período de recuperación no puede funcionar porque la Unión Española de Defensa contra la Droga, entidad privada patrocinadora del proyecto, no dispone de 77.000 pesetas, cantidad adeudada por el alquiler del local de los últimos siete meses.Según la nota de prensa de la citada entidad, «la Administración como tal ha dado muestras de una lamentable falta de sensibilidad hacia estos temas, aunque a nivel personal algunas personas que ocupan altos cargos en la burocracia administrativa, incluyendo un magistrado de Peligrosidad Social, el señor López Muñiz, estén proporcionando una ayuda muy valiosa». «La Unión Española de Defensa contra la Droga -continúa el comunicado- está desarrollando una tarea que realmente corresponde a la Administración, por lo que nos extraña y preocupa esa falta de interés.»

La citada entidad fue legalizada por el Ministerio del Interior en los últimos días de 1977. Desde entonces, y contando con unos medios muy escasos la asociación puso en funcionamiento un centro de vera no de recuperación de toxicómanos, en Arganda del Rey, al que asistieron una veintena de jóvenes drogadictos. Hace unos días concluyó una experiencia similar en un centro de la Seguridad Social en Navacerrada. Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid ha cedido una sala del ambulatorio situado en Navas de Tolosa, 10, donde se recibe a los jóvenes que acuden voluntariamente de todo el país. Hasta hoy, la asociación tiene en fase de recuperación a 128 de estos jóvenes, y otro centenar está en lista de espera. obligados a ello por la falta de instalaciones.

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