La televisión y la condición femenina

Ya tenemos en televisión la campaña que la Subdirección General de la Condición Femenina ha lanzado con el fin de cambiar mentalidades y actitudes hacia la mujer. Esta campaña, que por fuerza ha de ser corta y cuyo contenido se limita, en muchos casos, a pintar situaciones grotescas a las que no da ninguna solución, no es más que un pufo para lavarle la cara a la Subdirección en cuestión.O se termina con el terrorismo televisivo y publicitario o campañas como ésta sólo serán un engaño y un intentar salir del paso de lo más burdo. Mientras no se controle el sexismo de la publicidad, fund...

Ya tenemos en televisión la campaña que la Subdirección General de la Condición Femenina ha lanzado con el fin de cambiar mentalidades y actitudes hacia la mujer. Esta campaña, que por fuerza ha de ser corta y cuyo contenido se limita, en muchos casos, a pintar situaciones grotescas a las que no da ninguna solución, no es más que un pufo para lavarle la cara a la Subdirección en cuestión.O se termina con el terrorismo televisivo y publicitario o campañas como ésta sólo serán un engaño y un intentar salir del paso de lo más burdo. Mientras no se controle el sexismo de la publicidad, fundamentalmente, ¿de qué va a servir que una vez al día alguien diga que fregar platos no tiene sexo si durante cientos de veces ese mismo día se nos presenta a la mujer fregando, quitando polvo, cocinando, etcétera, y al hombre haciendo los trabajos más interesantes; o se hacen lavados de cerebro a las niñas dándoles muñecas, que para colmo echan moquitos, saliva o lloran con el fin de preparar a las futuras mamás?

Si la Subdirección quiere tener un mínimo de credibilidad, que empiece a hacer algo realmente efectivo. Por ejemplo, proponer al Consejo de Ministros algún decreto sobre control y prohibición del sexismo en la publicidad.