Calvo Sotelo inicia su visita a Holanda
El ministro español de Relaciones con la CEE, Leopoldo Calvo Sotelo, llegó ayer a La Haya continuando su gira por las nueve capitales de las Comunidades Europeas que inició la pasada semana en Copenhague. La postura holandesa en la reforma de la política agrícola comunitaria y en el reforzamiento de las instituciones de la CEE pueden ser los temas esenciales de las conversaciones que mantendrá el ministro con las primeras autoridades de los Países Bajos.
El primer ministro holandés, señor Van Haag, recibirá hoy al mister Europa español quien, además, tiene previstas conversacione...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El ministro español de Relaciones con la CEE, Leopoldo Calvo Sotelo, llegó ayer a La Haya continuando su gira por las nueve capitales de las Comunidades Europeas que inició la pasada semana en Copenhague. La postura holandesa en la reforma de la política agrícola comunitaria y en el reforzamiento de las instituciones de la CEE pueden ser los temas esenciales de las conversaciones que mantendrá el ministro con las primeras autoridades de los Países Bajos.
El primer ministro holandés, señor Van Haag, recibirá hoy al mister Europa español quien, además, tiene previstas conversaciones con el responsable de las relaciones exteriores del Gobierno de La Haya, Van der Klaauw, y con el secretario de Estado del mismo departamento, señor Arden.La presencia de Leopoldo Calvo Sotelo en la capital holandesa, después de haber visitado Dinamarca, tiene un doble interés porque en esta ciudad se abordarán dos temas que constituyen la espina dorsal del acercamiento de España a las Comunidades Europeas: la reforma agrícola y la reestructuración institucional de los nueve ante el ingreso de España, Grecia y Portugal en el territorio comunitario.
Quedan, también, otras cuestiones que preocupan a la Administración holandesa, como el coste financiero de esta operación-ampliación, la libre circulación de trabajadores de los países candidatos en los territorios que coordina el Tratado de Roma, y cuestiones específicas comerciales.
Pero quizá sea la agricultura el tema rey de las conversaciones hispano-holandesas. Persiste en la Comunidad la batalla entre las agriculturas del norte y del sur de la CEE. La subvencionada y la proteccionista, según los casos. Francia intenta convertirse en abanderada de la política mediterránea, candidatos aquí incluidos, y considera condición sine qua non la reforma de la Europa verde antes de toda ampliación. Para ello argumenta que su postura va en defensa de los que serán intereses futuros de las naciones candidatas, aunque de facto y a corto y mediano plazo, no hace sino defender sus propios intereses y los de Italia, que sigue la senda marcada por los franceses. Los agricultores proteccionistas del Norte y subvencionados (según productos) se defienden del embate francés y quieren acercarse a las posiciones de los candidatos con los que apenas tienen motivos de competencia alguna. De ahí el interés y la perspectiva del viaje de Calvo Sotelo a La Haya.
La reforma institucional de la CEE, segundo tema de interés, parece mantenida por los holandeses, pero no hasta el punto de bloquear el proceso integrador comunitario.