Las tensiones inflacionistas en EEUU se recrudecen
Los precios subieron un 1,3 % en Estados Unidos durante el mes de abril, lo que supone el alza más importante en los últimos tres años y medio y equivale a una inflación anual del 15 %, según datos oficiales del Gobierno norteamericano hechos públicos ayer.
El comunicado oficial señala que la mayor parte de los incrementos de precios se produjeron en productos alimenticios, como ha venido siendo norma en los meses anteriores, y concretamente en frutas y verduras, productos lácteos y cárnicos.
El anuncio del fuerte incremento de los precios en abril provocó una nueva serie de ...
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Los precios subieron un 1,3 % en Estados Unidos durante el mes de abril, lo que supone el alza más importante en los últimos tres años y medio y equivale a una inflación anual del 15 %, según datos oficiales del Gobierno norteamericano hechos públicos ayer.
El comunicado oficial señala que la mayor parte de los incrementos de precios se produjeron en productos alimenticios, como ha venido siendo norma en los meses anteriores, y concretamente en frutas y verduras, productos lácteos y cárnicos.
El anuncio del fuerte incremento de los precios en abril provocó una nueva serie de críticas contra la Administración Carter y su programa anti-inflación. Las últimas encuestas muestran que el vertiginoso descenso en la popularidad de Jimmy Carter está en buena parte motivado por la inflación, que fue el año pasado cercana al 7 %, pero que podría ser muy superior este año.
En lo que va de año, los precios al consumidor aumentaron un 0,6 %, enero; un 1,1 %, en febrero; un 0,6 %, en marzo, y batieron
todos los récords en abril con la subida del 1,3%. Desde noviembre de 1974 no se había sufrido un alza de precios similar.
Entre las medidas que se espera tome el Gobierno en los próximos días para combatir la inflación está la congelación de los salarios y la autorización para aumentar los mismos como máximo al mismo nivel que suba el coste de la vida.
La Administración Carter continúa asegurando que la inflación se mantendrá este año al 7 % y lucha por elaborar una política económica que permita simultáneamente estimular la economía y combatir el desempleo. La reducción de impuestos que Carter pensaba aplicar para estos dos últimos fines está siendo tachada de inflacionista en algunos sectores del Congreso, lo que crea una nueva dificultad al presidenteque necesita la aprobación del legislativo.