Sí a la unidad socialista

Son varias las cartas publicadas en EL PAIS en contra de la unidad socialista, y yo, que estoy a favor de la unidad socialista, quiero dar réplica a las mismas. Me cuesta trabajo creer que los que están en contra de la unidad sean auténticos socialistas, casi pienso que son más bien adversarios del socialismo, pues prescindiendo de siglas de partido, la unidad sólo puede beneficiar al socialismo.La unidad de los socialistas convertiría -por la matemática del voto reflejado el pasado 15 de junio- a esta fuerza política en la primera del país, con todo lo que ello representa de alternativa de po...

Son varias las cartas publicadas en EL PAIS en contra de la unidad socialista, y yo, que estoy a favor de la unidad socialista, quiero dar réplica a las mismas. Me cuesta trabajo creer que los que están en contra de la unidad sean auténticos socialistas, casi pienso que son más bien adversarios del socialismo, pues prescindiendo de siglas de partido, la unidad sólo puede beneficiar al socialismo.La unidad de los socialistas convertiría -por la matemática del voto reflejado el pasado 15 de junio- a esta fuerza política en la primera del país, con todo lo que ello representa de alternativa de poder de izquierdas, de municipios sin caciques y sin corrupción y de la ejecución de un programa de política de empleo, salarial, de pensiones, educativa y del suelo, de reforma agraria, fiscal, del sistema financiero y de las estructuras comerciales, de la empresa, de la justicia y penitenciaria.. En definitiva, se realizaría la esperanza de millones de españoles de tener por fin un Gobierno y un programa de izquieidas, porque una cosa está clara, y es que la única fuerzas política con capacidad para desalojar del poder a la derecha es el socialismo, y dentro del socialismo y por deseo expreso del pueblo, el PSOE; todas las acciones encaminadas a debilitar a esta fuerza política fortalecen a la derecha y, por tanto, no pueden venir de auténticos socialistas, pues los verdaderos socialistas, como hombres de un partido democrático y de izquierdas, tendremos nuestras diferencias, disensiones y diversidad de criterios, pero contamos también con el debate enriquecedor y el voto clarificador de posturas que impone al final la disciplina del sentir de la mayoría en nuestras asambleas. Así nuestras diferencias y disputas quedan dentro de casa, pero de puertas para afuera defendemos el socialismo como un solo hombre y trabajamos por engrandecerlo.

El PSP y el PSOE tienen todo en común, pues ambos son partidos de clase, socialistas, marxistas y revolucionarios, que pretenden la ttansformación de la sociedad; entonces, compañeros, ¿por qué esta absurda división? Agrupémonos como dice nuestra canción y conquistemos el poder para transformar poco a poco la sociedad, haciéndola másjusta y más humana.

La sociedad más próspera y avanzada del mundo es la sueca; lo consiguieron gracias a casi cincuenta años de ininterrumpidos

Gobiernos socialistas y al apoyo del LO, sindicato socialista sueco, cosaque no conviene soslayar.