Entrevista a Rodríguez de Viguri

«-¿Por qué se ha significado usted tanto en la defensa de la causa saharaui?-Entre otras razones, porque me considero un hombre honesto. Y como tal, quiero que mis hijos tengan un buen concepto de la actuación que su padre tuvo en el caso del Sahara.

-Pues dicen, mi coronel, que lo que en realidad ocurre con usted es que le paga el Polisario.

-Sí, sí. Lo han dicho, pero no es cierto que a mí me pague el Polisario. No sé si sabrá que tengo dos expedientes abiertos. ¿No lo sabía? Pues bien, un juez militar en una diligencia me ha preguntado, hace poco, que le dijera cuáles habían s...

«-¿Por qué se ha significado usted tanto en la defensa de la causa saharaui?-Entre otras razones, porque me considero un hombre honesto. Y como tal, quiero que mis hijos tengan un buen concepto de la actuación que su padre tuvo en el caso del Sahara.

-Pues dicen, mi coronel, que lo que en realidad ocurre con usted es que le paga el Polisario.

-Sí, sí. Lo han dicho, pero no es cierto que a mí me pague el Polisario. No sé si sabrá que tengo dos expedientes abiertos. ¿No lo sabía? Pues bien, un juez militar en una diligencia me ha preguntado, hace poco, que le dijera cuáles habían sido mis últimos domicilios. Presumo que será porque creen que he comprado pisos con dinero de los saharauis. Tal vez ello se debe a que en una ocasión yo declaré, en sentido metafórico, que mi casa era el consulado de los saharauis. Es verdad que todos los saharauis y prosaharauis pasan por mi casa. Y si yo soy un defensor de la causa saharaui se debe a que el Gobierno español me encomendó dar la independencia al Sahara y, sin embargo, luego me vi obligado a hacer lo contrario. Ahora bien, lo que debe quedar claro es que los españoles, en su conjunto, no hemos tenido nada que ver con la venta del Sahara, la cual ha sido llevada a cabo por un grupo.

-¿Un grupo que se ha movido por intereses económicos?

-Me parece que sí. Y a ese grupo de presión se le han sumado algunos políticos que buscaban la vida fácil y que consideran la política como el arte de permanecer.

- ¿Se está usted refiriendo a políticos que están todavía en el poder?

-A políticos que continúan incrustados en el poder, sí. Si no, a estas alturas la suerte del pueblo saharaui sería otra. ¿Ha dejado acaso de venderse armamento español a Marruecos? No, desde luego. Antes era oficialmente. Ahora, a través de los lobbys. En el fondo, nada ha cambiado. ¿Pero cómo es que, mientras el ministro Oreja dice que "la población saharaui seguirá creciendo", el pasado 20 de diciembre ha sido entregado a Marruecos el hospital de El Aaiún sin indemnización alguna? Y no hablemos ya de las lanchas que para Mauritania se están armando en San Fernando.

-¿Dice usted en San Fernando?

-Digo en San Fernando. Sí, sí. Son lanchas que después se emplearán. 6Sabe para qué? Pues para apresar a nuestros pesqueros. Hay infinidad de preguntas para las que no encuentro respuesta,

-¿Piensa usted que el ex ministro Carro es el cerebro gris del acuerdo tripartito de Madrid?

-Hombre, eso es lo que más se ha difundido por ahí. Y también es verdad que Carro en las conferencias que sobre el tema ha dado emplea unos argumentos especiosos que no resisten la menor crítica.

-¿Como por ejemplo?

-Como, por ejemplo, decir que España nunca había tenido la soberanía del Sahara. Pero, ¡coño! Entonces, ¿cómo la provincializamos si no había soberanía? Cuando se provincializa un territorio es porque sobre él hay menos derechos. También hay otra afirmación que comparte José Solís y de la que yo disiento. Los dos dicen que han ahorrado que lloren muchas madres españolas.

-¿Y eso usted no se lo cree?

-No. Primero, por el poder de disuasión de nuestro Ejército. Podría haber habido bajas, pero es que ya le digo que a eso no se llegaría. El poder de disuasión de las fuerzas españolas en el Sahara era enorme.

Semana del 8 al 14 de febrero