Egipto minimiza el significado de la Conferencia de El Cairo

La Conferencia de El Cairo comienza hoy a las once de la mañana en un hotel protegido como una fortaleza, situado a cincuenta kilómetros de El Cairo, lejos de las multitudes y, por tanto, más a resguardo, según esperan los servicios de seguridad egipcios, de un hipotético atentado. Egipto y las otras partes que estarán presentes en la mesa de negociaciones (Israel, Estados Unidos y la ONU) han ido progresivamente restando importancia a este diálogo que había sido bautizado pomposamente en principio como «conferencia» y ahora es definido simplemente como «conversaciones informales con el fin de...

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La Conferencia de El Cairo comienza hoy a las once de la mañana en un hotel protegido como una fortaleza, situado a cincuenta kilómetros de El Cairo, lejos de las multitudes y, por tanto, más a resguardo, según esperan los servicios de seguridad egipcios, de un hipotético atentado. Egipto y las otras partes que estarán presentes en la mesa de negociaciones (Israel, Estados Unidos y la ONU) han ido progresivamente restando importancia a este diálogo que había sido bautizado pomposamente en principio como «conferencia» y ahora es definido simplemente como «conversaciones informales con el fin de preparar la Conferencia de Ginebra». Mientras tanto, en Beirut, el secretario de Estado norteamericano, Cyrus Vance, subrayó que no cabía esperar resultados espectaculares de la reunión cairota.Este esfuerzo por minimizar el carácter de la reunión de El Cairo es más notorio por parte de Egipto, que trata de convencer a los Estados árabes «rebeldes» de que no se trata de conseguir un acuerdo bilateral, sino echar los cimientos de una paz global, y sin marginar la Conferencia de Ginebra. En este sentido, y como símbolo, en la mesa de negociaciones habrá sillas vacías para las delegaciones que han rechazado la conferencia (Siría, Jordania, Líbano, la Organización para la Liberación de Palestina y la Unión Soviética), para indicar que pueden incorporarse cuando quieran a las conversaciones, cuya duración prevista es de siete a diez días.

El representante norteamericano se refirió, a su llegada a El Cairo, a un mensaje transmitido por el presidente norteamericano, Jimmy Carter, en el que se manifiesta en favor de una paz global para la región.

Las medidas de seguridad que rodean el lugar de la conferencia se hicieron notar también a la llegada, ayer, a la capital egipcia del avión que. trasladó a El Cairo a la delegación israelí, que fue recibida cordialmente pero sin ceremonias. El himno israelí no fue interpretado ni su bandera izada.

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