Cuestión de cantes

Manolo Velázquez fue el primer jugador que le cantó las cuarenta a Santiago Bernabéu en una concentración. A causa de Manolo Velázquez, Santiago Bernabéu recibió un pequeño cante por parte de unos socios contestarios en la cena homenaje. Fue la primera vez que en un parlamento bernabeuiano alguien se atrevió a mediar. Manolo Velázquez será siempre un postre agridulce para el viejo pescador de Santa Pola.Pienso que no se ha terminado aquí la cuestión de los cantes. No ha terminado porque el público la va a tomar con Guerini, que si nunca convenció, ahora, encima, va a tener la sombra de Velázqu...

Manolo Velázquez fue el primer jugador que le cantó las cuarenta a Santiago Bernabéu en una concentración. A causa de Manolo Velázquez, Santiago Bernabéu recibió un pequeño cante por parte de unos socios contestarios en la cena homenaje. Fue la primera vez que en un parlamento bernabeuiano alguien se atrevió a mediar. Manolo Velázquez será siempre un postre agridulce para el viejo pescador de Santa Pola.Pienso que no se ha terminado aquí la cuestión de los cantes. No ha terminado porque el público la va a tomar con Guerini, que si nunca convenció, ahora, encima, va a tener la sombra de Velázquez. Ya es una ironía en sí, que Miljanic se empeñe en sustituir a Velázquez por medio de Guerini. Bernabéu se defiende del tema velazqueño pasándole la pelota al equipo técnico que es, en definitiva, quien debe ser el responsable de las bajas y altas, pero mucho me temo que al final, si hay enfados en la masa, las protestas vayan al palco y no al banquillo.

Teóricamente, dada la edad de Velázquez no deberían producirse polémicas, y, hasta es probable que de haber continuado un año más hubiese sido el público el primer convencido de la necesidad de retirarle del equipo. Las circunstancias han hecho de este finiquito una cuestión propicia a la controversia. El primer perjudicado será Guerini y sólo si el balón rueda favorablemente todo se olvidará. De todas maneras, la posición de Miljanic es cada día más inestable.