Las centrales sindicales, contra el plan económico

Responsables de las tres centrales sindicales con mayor implantación en el país se manifestaron ayer en una encuesta preparada por Europa Press acerca del programa económico del Gobierno aprobado en la reunión del Gabinete del pasado sábado. MARCELINO CAMACHO(Comisiones Obreras)

Comisiones Obreras, cree que con este paquete de medidas económicas no se sale de la crisis, y además, se agrava. Lo único que se hace es intentar cargársela a los trabajadores.

Las medidas fiscales no sabemos si se van a aplicar, lo que sí hay ya es un aumento de precios y un aumento constante del coste ...

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Responsables de las tres centrales sindicales con mayor implantación en el país se manifestaron ayer en una encuesta preparada por Europa Press acerca del programa económico del Gobierno aprobado en la reunión del Gabinete del pasado sábado. MARCELINO CAMACHO(Comisiones Obreras)

Comisiones Obreras, cree que con este paquete de medidas económicas no se sale de la crisis, y además, se agrava. Lo único que se hace es intentar cargársela a los trabajadores.

Las medidas fiscales no sabemos si se van a aplicar, lo que sí hay ya es un aumento de precios y un aumento constante del coste de la vida.

Ante estas medidas, si se llevan adelante, y a la vista de que la devaluación es un hecho, y el coste de vida sigue hacia arriba, vamos a tener que aumentar la presión de los trabajadores.

Resumiendo mi juicio sobre las medidas: las de nivel fiscal son positivas y progresivas, difíciles de aplicar. Las medidas de orden económico-social son negativas, son un intento de cargar la crisis a los trabajadores, y van a encontrar, corno es natural, la reacción de los trabajadores, a menos que se cambie la táctica seguida hasta aquí, es decir, que se discuta seriamente, no que se nos informe de que se van a tomar medidas.

Todo esto exige que, ante el peligro de que las tensiones aumenten y crezca el peligro de desestabilización, la crisis se aborde a nivel nacional rápidamente, es decir, con un Gobierno de concentración en el que estén todas las fuerzas y en el cual la participación de los trabajadores sea bastante más amplia que la que hay en éste. De lo contrario, la situación se va a complicar y podemos encontrarnos dentro de seis meses con una situación tan difícil y tan compleja como la de Italia.

USO

(Secretario general)

El secretariado confederal, entendiendo que la necesidad de un plan de saneamiento económico es una urgencia ineludible, manifiesta su absoluta disconformidad con la inconcreción de unas medidas que, además de cargar sobre los trabajadores el mayor peso de los costos de ese plan, pone en cuestión la efectividad del mismo.

Por otra parte, está la inconcreción de medidas contra el paro, verdadero problema crucial que afecta a los trabajadores, la congelación salarial y los topes de aumento lineal, que no superan en principio el nivel de inflación previsible.

Ante ello, la USO llama a los trabajadores y a las centrales democráticas a urgir la necesidad de un plan que garantice la eficacia y el reparto proporcional de sus costos y a desarrollar la acción unitaria por:

1. Establecimiento de un salario mínimo suficiente aplicable a pensionistas y jubilados.

2. Intervención de las centrales democráticas en la elaboración del índice del coste de la vida y de productividad.

3. Seguro de desempleo que alcance a todos los trabajadores parados.

4. Política de inversiones orientada a la creación de puestos de trabajo.

5. Ampliación de la edad real de escolarización obligatoria y reducción flexible de la jubilación.

6. Represión efectiva de la evasión de capitales.

7. Medidas contra la especulación inmobiliaria y del suelo.

8. Cambio radical de la política inversora de las cajas de ahorro, que hasta ahora ha beneficiado casi exclusivamente a empresas y sectores privados.

9. Reforma de la Seguridad Social: con ampliación de la participación del Estado en su financiación, nueva política asistencial, control de la industria farmacéutica y participación de las centrales en la gestión de la Seguridad Social.

NICOLAS REDONDO

(Secretario general de UGT)

Quiero decir que adelanto una impresión personal y provisional sobre las medidas, ya que el juicio concreto y técnico lo dará la UGT mediante un comunicado.

Las medidas económicas en su intencionalidad pueden ser positivas, lo que no creo es que, en el supuesto de que se apliquen en toda su entidad, tengan capacidad para solucionar la situación económica del país.

En cuanto a las medidas sociales, personalmente no creo en la efectividad de esos aumentos salariales que se anuncian, tales como las 50.000 pesetas lineales, que puede suponer un aumento salarial de un 17 al 20 % sobre las rentas más bajas y un 4 % sobre las altas. Me parece, además, que el índice de inflación anual va a ser superior que el que prevé el Gobierno, que según nos ha dicho a nosotros confía en que sea de un 17 % anual.

Por otra parte, el aumento lineal anunciado por el Gobierno es en cierto modo un sistema de control salarial y no una solución para la clase trabajadora.

Con estas medidas tampoco se va a solucionar el problema del paro, aun admitiendo que ese problema no lo soluciona ni este ni otro Gobierno, ya que es un problema estructural de la sociedad

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