Dificultades en la fusión Saab-Volvo

La fusión de Saab y Volvo, las dos compañías automovilistas más importantes de Suecia, encuentra dificultades en su materialización. La decisión inicial acerca de esta fusión fue hecha pública inesperadamente el pasado mes de mayo (EL PAIS, 8-V), después de varias semanas de negociaciones entre ambas empresas. Una vez conocido el deseo de ir a la fusión se abrió un período de estudio e información al Gobierno, accionistas y sindicatos, que según todos los expertos podía durar varios meses. La fusión quedaba emplazada para fin de año.Ahora, el consejo de Saab Scania ha decidido retrasar la fusi...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La fusión de Saab y Volvo, las dos compañías automovilistas más importantes de Suecia, encuentra dificultades en su materialización. La decisión inicial acerca de esta fusión fue hecha pública inesperadamente el pasado mes de mayo (EL PAIS, 8-V), después de varias semanas de negociaciones entre ambas empresas. Una vez conocido el deseo de ir a la fusión se abrió un período de estudio e información al Gobierno, accionistas y sindicatos, que según todos los expertos podía durar varios meses. La fusión quedaba emplazada para fin de año.Ahora, el consejo de Saab Scania ha decidido retrasar la fusión. Según unas fuentes, este retraso se debe a la postura de los sindicatos. Según otras, a la de algunos departamentos de Saab que no ven ningún beneficio para la empresa en la fusión con su habitual competidor.

La idea de fusión aparecía como la más razonable para evitar que ambas empresas mantuvieran una dimensión estrecha en un mercado cada vez más difícil y más condicionado por las grandes compañías.

Archivado En