Chirac no abandonará, "salvo razón grave e imperiosa"

«El señor Jacques Chirac me con firmó su decisión de presentarse a la alcaldía de París, salvo razón grave o imperiosa», declaró anoche el primer ministro francés, señor Raymond Barre, en un comunica do para informar a los parisienses al final de un día pródigo en sobre saltos, a causa de este delicado «hacer» que sigue dominando la vida política gala. Por su parte, e señor Michel d'Ornano, el otro candidato giscardiano, rival de señor Chirac, «se retiraría si surgiese un candidato de unión» según el primer ministro.La jornada empezó con el primer traspiés para el señor Barre, a quien el presi...

«El señor Jacques Chirac me con firmó su decisión de presentarse a la alcaldía de París, salvo razón grave o imperiosa», declaró anoche el primer ministro francés, señor Raymond Barre, en un comunica do para informar a los parisienses al final de un día pródigo en sobre saltos, a causa de este delicado «hacer» que sigue dominando la vida política gala. Por su parte, e señor Michel d'Ornano, el otro candidato giscardiano, rival de señor Chirac, «se retiraría si surgiese un candidato de unión» según el primer ministro.La jornada empezó con el primer traspiés para el señor Barre, a quien el presidente Giscard d'Estaing le había encargado anteayer la misión de encontrar el tercer hombre de unión en la mayoría gubernamental. Los señores D'Ornano y Chirac fueron convocados al hotel Matignon, pero sólo aceptó la entrevista el candidato apadrinado por el jefe del Estado. El presidente del Rasamblement envió al secretario general del RPR, señor Jerome Monov, portador de una carta

Este último, a su vez e inmediatamente, contestó al candidato gaullista. El misterio del contenido del correo tan urgente mantuvo en vilo a la clase política, mientras los señores Chirac: y D'Ornano dieron los primeros pasos de su campaña electoral en los barrios parisienses. Paralelamente, a lo largo del día, se confirmó que la secretaria general del Partido Radical, señora Jacqueline Lebout, traicionaba el apoyo incondicional de su partido al señor D'Ornano, y se declaraba candidata en las listas del señor Chirac. Momentos después, los radicales de París pidieron la expulsión de la señora Lebout.

Al final del día, durante una, hora, el presidente de la República y el primer ministro se reunieron en el palacio del Elíseo para dilucidar los resultados de esta primera jornada de la misión Barre en busca del tercer hombre. Y ya entrada la noche, este último comunicó la decisión irrevocable de su antecesor, salvo razón grave o imperiosa, que en estos momentos nadie concebía. El señor Barre declaró, en conclusión, que la situación es preocupante.