La realidad falangista

En nombre de los falangistas del FES, queremos darle públicamente las gracias por la información objetiva que hizo su diario de los incidentes del pasado día 29 en el Palacio de Congresos de Madrid.Para cuantos nos esforzamos porque la Falange no vuelva a ser la justificación retórica de la reacción, esta información veraz es muy importante, al mostrar a la opinión pública la realidad falangista, debatiéndose y esforzándose en la búsqueda de su integridad y autenticidad.

El pueblo español debe de estar advertido. Prevenido contra los falsos profetas, que en estos últimos cuarenta años h...

En nombre de los falangistas del FES, queremos darle públicamente las gracias por la información objetiva que hizo su diario de los incidentes del pasado día 29 en el Palacio de Congresos de Madrid.Para cuantos nos esforzamos porque la Falange no vuelva a ser la justificación retórica de la reacción, esta información veraz es muy importante, al mostrar a la opinión pública la realidad falangista, debatiéndose y esforzándose en la búsqueda de su integridad y autenticidad.

El pueblo español debe de estar advertido. Prevenido contra los falsos profetas, que en estos últimos cuarenta años han comerciado con la doctrina y con la sangre de los caídos y que hoy pretenden -desaparecido su valedor- repetir su felonía.

El pasado día 29 no se produjo un luctuoso suceso, del tipo de los de Montejurra el presente año o de Salamanca en abril de 1937, de verdadero milagro. Los individuos que iniciaron. la agresión -a los que calificamos de pistoleros- no llegaron en esta ocasión hacer uso de las armas que portaban y que en algunos momentos esgrimieron, pero cualquier día nos darán una muestra del peso de sus «razones» y de su «valentía». Pobre falangismo es aquel que se sirve de esta clase de personas como elemento protector.