La huelga de empleados de banca, duro golpe a la economía irlandesa

La huelga de empleados de banca, que se mantiene en la República de Irlanda desde hace seis semanas, puede tener efectos desastrosos en la ya empobrecida industria del país.El turismo es uno de los renglones de la economía que están resultando más afectados por esta situación. Es prácticamente imposible cambiar cheques y los poseedores de cheques de viaje, usados por la gran mayoría de los turistas, se han visto obligados a suspender sus vacaciones en el Eire.

A la vista de los problemas que viene generando la huelga, un comité nombrado por el Gobierno ha dado a conocer un informe, en e...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La huelga de empleados de banca, que se mantiene en la República de Irlanda desde hace seis semanas, puede tener efectos desastrosos en la ya empobrecida industria del país.El turismo es uno de los renglones de la economía que están resultando más afectados por esta situación. Es prácticamente imposible cambiar cheques y los poseedores de cheques de viaje, usados por la gran mayoría de los turistas, se han visto obligados a suspender sus vacaciones en el Eire.

A la vista de los problemas que viene generando la huelga, un comité nombrado por el Gobierno ha dado a conocer un informe, en el que pide a la propia Administración que reconsidere su actitud ante las reivindicaciones de los huelguistas.

La huelga se inició ante la negativa del Gobierno a aprobar un aumento salarial para los empleados de banca. Esta subida, acordada por los propios empresarios, iba en contra de la política de sueldos expresada por el Gobierno en su presupuesto anual.

En el informe se dice que si no se vuelve a la normalidad en los bancos, numerosos inversores, e incluso bancos extranjeros establecidos en la República se verían obligados a abandonar las actividades iniciadas y cerrar sus oficinas.

Archivado En