Veintiún detenidos en Bilbao, Madrid y Sevilla en relación con los atentados del día 18

Veintiuna personas han sido detenidas -diez en Madrid, seis en Bilbao y cinco en Sevilla- y acusadas por la policía de pertenecer al Partido Comunista de España (reconstituido) y de estar implicadas, en distinto grado, en los atentados cometidos en varias ciudades el pasado día 18. Estos datos, así como una amplia nota oficial, fueron facilitados ayer por el director general de Seguridad, Emilio Rodríguez Román, en una rueda de prensa, a la que asistieron también el jefe superior de Policía de Madrid, señor Quintero, y los dos funcionarios de policía que más se han distinguido en la investigac...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Veintiuna personas han sido detenidas -diez en Madrid, seis en Bilbao y cinco en Sevilla- y acusadas por la policía de pertenecer al Partido Comunista de España (reconstituido) y de estar implicadas, en distinto grado, en los atentados cometidos en varias ciudades el pasado día 18. Estos datos, así como una amplia nota oficial, fueron facilitados ayer por el director general de Seguridad, Emilio Rodríguez Román, en una rueda de prensa, a la que asistieron también el jefe superior de Policía de Madrid, señor Quintero, y los dos funcionarios de policía que más se han distinguido en la investigación de este caso.

El señor Rodríguez Román señaló que se trataba de una investigación todavía no cerrada, y que hay más detenidos que todavía no han pasado a disposición judicial, así como existe la posibilidad de que se produzcan nuevas detenciones.La nota oficial facilitada por la Comisaría General de Investigación Social, después de enumerar los lugares -Madrid, Barcelona, Bilbao, Sevilla, Vigo y El Ferrol del Caudillo- en que aparecieron «hojas o manifiestos, reivindicando los atentados antes citados, e igualmente reconociendo ser los autores del asesinato de cuatro policías armados en Madrid», el 1 de octubre de 1975, señala que tales hojas estaban suscritas por los Grupos de resistencia Antifascista 1º de octubre, organización desconocida por completo en los medios policiales, «si bien -añade la nota- y mediante los estudios técnicos en cuanto a su confección tipográfica, pronto pudo determinarse la identidad de aquellos grupos que, en realidad, no eran sino militantes del llamado Partido Comunista de España (reconstituido)».

El señor Rodríguez Román comentó que la organización cuenta con unos cincuenta o sesenta afiliados en toda España y que «no han tenido arraigo -señala la nota oficial- sino en grupos dispersos de profesionales y estudiantes, lo que les ha hecho permanecer casi en el anonimato, tras las sucesivas desarticulaciones de que fueron objeto por la policía».

Operación en provincias

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Con estos antecedentes la policía montó una operación para la madrugada del día 20 pasado que abarcó a las provincias de Madrid, Vizcaya, La Coruña, Pontevedra, Sevilla, Córdoba y Cádiz.

Según se afirma en la misma nota oficial que venimos citando, algún medio de comunicación social aparece como responsable índirecto de que no se alcanzase un éxito total en el servicio, ya que «aquella misma noche -la del 19 al 20- se dio la noticia de haber identificado los Grupos de Resistencia Antifascista con el Partido Comunista Reconstituido y una gran parte de los responsables huyeron de sus domicilios habituales».

Después de relacionar la publicación de aquel extremo con la falta de un éxito total que, en la nota aparece como relación de causa a efecto, añade la información oficial que, no obstante, se logró la captura de tres miembros del comité central del partido: Joaquín Calero Arconés -en Bilbao-, José María Sánchez Casas -en Sevilla- y Pedro María Martínez de llarduya -también en Bilbao-, con lo que «se ha conseguido prácticamente desarticular la organización y, además, dejar probada fehacientemente la culpabilidad -dice la nota policial- en los atentados del 18 de julio y en los asesinatos del 1º de octubre del pasado año».

A Joaquín Calero Arconés se le ocuparon materiales para confeccionar artefactos, una pistola con munición y un comunicado suscrito por la ejecutiva del comité central, «dirigido a los militares y activistas del partido, en el que exponen las líneas básicas de su futura actuación». En ese comunicado claramente se dice -continúa la nota oficial- que este 18 de julio será el comienzo del movimiento comunista de resistencia al fascismo e instan a hacer planes concretos para golpearle en todas partes, destruyendo sus símbolos y todo lo relacionado con la sublevación militar y con su momentánea victoria, y -siguen- se hará de dicha fecha un día de luto nacional».

La nota prosigue relatando que la pistola encontrada a Calero Arconés le fue entregada el pasado día 14 por uno de los componentes del grupo armado, que se trasladó a Bilbao para colocar las bombas que hicieron explosión en la capital vizcaína y Baracaldo».

La pistola ha sido identificada como perteneciente a un guarda jurado del polvorín La Raigosa, en Puente Caldelas (Pontevedra), «al aue se la arrebató uno de los miembros del comando armado que, el día 25 de mayo último realizó un asalto a dicho polvorín, apoderándose de 100 kilos de dinamita Goma-2».

Maniflesto intervenido

En Sevilla la policía ha intervenido un manifiesto firmado por Equipo de información democrática «que no llegó a ser repartido en dicha ciudad, aunque sí en Madrid y en pequeñas cantidades, en el que dan minuciosos detalles -dice la misma nota que venimos citando- sobre los lugares en que colocaron los artefactos y los motivos por los que eligieron los objetivos como símbolos del régimen. Curiosamente dan como explosionada la bomba colocada en el edificio del Gobierno Militar de Madrid, cuando realmente tal artefacto fue descubierto a tiempo y desactivado. Otro tanto ocurre con la bomba puesta en Barcelona en la sede del servicio de Colocación Sindical que asimismo fue desactivada».

La nota añade que la Guardia Civil halló en Robledo de Chavela, oculto en un agujero y cubierto con una gran piedra, un bidón de plástico con pistolas «entre ellas tres reglamentarias de 9 milímetros corto, pertenecientes a tres de los cuatro policías armados asesinados en Madrid el 1º de octubre; igualmente, había abundante munición, 25 granadas de mano, 47 multiplicadores de granadas, cartuchos detonadores y mecha para artefactos».

Se señala también que el estudio de balística que llevó a cabo a raíz del asesinato de los policías armados en octubre de 1975 pasado, permitió comprobar que una de las armas utilizadas en aquella fecha «fue también la que causó la muerte de un guardia civil el 2 de agosto de 1975 en las proximidades del canódromo de la capital de España».

El director general de Seguridad señaló que las granadas y la munición fueron sustraídas del parque de Artillería y Maestranza de Madrid, el pasado día 21 de marzo, por un soldado que desertó de su unidad, también miembro del partido. Se trata, según el señor Rodríguez Román, de Antonio Pedrero Donos, hombre introvertido, estudiante de Sociología y que todavía no ha sido detenido.

La nota oficial termina especificando la estructura orgánica del partido, con un comité central de 15 miembros, cinco de los cuales forman la comisión ejecutiva del mismo.

Detenidos

En Bilbao han sido detenidos Joaquín Calero Arconés, de veintisiete años; Ignacio Veiga Tobia, alias Txistu, de veinticinco años; Josefina García Aramburu, Ana, de veinticuatro años; Jesús Lozoya Rodríguez, Juan, de treinta años; Pedro María Martínez de llarduya y Aguirre, de veintiséis años, y María Luz Begoña Pérez Barrientos, Isabel, de veintidós años.

En Sevilla resultaron detenidos José María Sánchez Casas, alias Serrano, Vargas y Vicente; Antonio Joaquín Núñez Roldán, de veintiún años; Angel Luis Bravo Clavel, de diecinueve años; José Antonio Ramón Teijido, de veintinueve años, y María Pilar Millán Merello, de veintiún años.

En Madrid fueron detenidos Antonio Calderón Sánchez de Rojas, de veinticuatro años; José Daniel Vega Rivas, de diecinueve años; Rafael Nieto Gómez, de veintiséis años; Isabel Sanz Mallous, de veinticinco años; María del Carmen López Millán, de veintiún años; Rosa María López Millán, de diecinueve años; Ramón Moral Martín, de veintiséis años, y Blas López Pérez, de veinticinco años, todos ellos puestos en libertad provisional por el Tribunal de Orden Público, Y Jesús Fornielles Casado, de veinte años, y Enrique Francisco Fossoul de la Sierra, de veintidós años.

Archivado En