En paro 2.500 trabajadores de Barreras

Dos millares y medio de trabajadores de Hijos de J. Barreras, SA, permanecen en paro desde el pasado martes, día 20, actitud en la que han anunciado continuarán en tanto la empresa no les abone diversas cantidades y readmita a 23 compañeros, que constituyen la mayoría de los despedidos por los astilleros desde 1966.

La crisis de Barreras ha llegado a una etapa delicada. La empresa iniciaba ayer en Madrid negociaciones con la firma norteamericana Chevron, interesada en la compra de la mayor plataforma petrolífera autopropulsada del mundo, en avanzada construcción en la factoría vigue...

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Dos millares y medio de trabajadores de Hijos de J. Barreras, SA, permanecen en paro desde el pasado martes, día 20, actitud en la que han anunciado continuarán en tanto la empresa no les abone diversas cantidades y readmita a 23 compañeros, que constituyen la mayoría de los despedidos por los astilleros desde 1966.

La crisis de Barreras ha llegado a una etapa delicada. La empresa iniciaba ayer en Madrid negociaciones con la firma norteamericana Chevron, interesada en la compra de la mayor plataforma petrolífera autopropulsada del mundo, en avanzada construcción en la factoría viguesa y abandonada por la sociedad que había hecho el encargo.

En círculos económicos vigueses se considera que existen grandes posibilidades de que los norteamericanos adquieran la plataforma, lo que resulta indispensable para que el personal pueda cobrar la primera quincena del presente mes, la paga extraordinaria y parte de las vacaciones, todo ello por un importe superior a 60 millones de pesetas.

De estos contactos con Chevron está pendiente también la decisión final sobre la venta a Deutz de la mayor parte de las acciones de la fábrica de motores del complejo industrial vigués.

Por su parte, trece miembros del jurado de empresa de Barreras continuaron ayer en Madrid contactos a alto nivel con la Administración para buscar una salida a la crisis, agudizada al quedar roto el acuerdo de reincorporación de los 23 despedidos, a algunos de los cuales la empresa les exige la devolución de dos millones y medio de pesetas, importe de las indemnizaciones recibidas. Los trabajadores han acusado a los directivos de la empresa de haber incumplido el compromiso, por lo que persisten en su actitud y añaden a las reivindicaciones planteadas la de que los readmitidos no tengan que reintegrar a la empresa las cantidades cobradas.

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