Las Cajas encajan en cualquier contexto sociopolítico

-¿Cuál es el sistema de nombramiento y composición de los Consejos de Administración de las Cajas?Es multiforme. Cada Caja tiene sus propios estatutos, y la normativa común a todas es reducida. Hoy día, en los Consejos de las Cajas hay representantes de los propios impositores, representaciones de colegios profesionales, de entidades o corporaciones de especial arraigo dentro de la provincia o zona en la que la Caja actúe; dos representantes de la Organización Sindical (uno de los Consejos de Empresarios y otro de los Consejos de Trabajadores), Presentados en temas por los citados Conse...

-¿Cuál es el sistema de nombramiento y composición de los Consejos de Administración de las Cajas?Es multiforme. Cada Caja tiene sus propios estatutos, y la normativa común a todas es reducida. Hoy día, en los Consejos de las Cajas hay representantes de los propios impositores, representaciones de colegios profesionales, de entidades o corporaciones de especial arraigo dentro de la provincia o zona en la que la Caja actúe; dos representantes de la Organización Sindical (uno de los Consejos de Empresarios y otro de los Consejos de Trabajadores), Presentados en temas por los citados Consejos y por supuesto, representantes de las corporaciones o personas jurídicas, que han sido fundadores de las propias Cajas de Ahorros.

-La acusación dirigida a las Cajas en el sentido de que sus Consejos, generalmente consejos de ancianos, eran poco eficaces y poco profesionales, ¿qué fundamento puede tener?

-Creo que es un tema sobre el que hay que hablar con respeto porque, evidentemente, los es pañoles debemos agradecimiento a estos consejeros que han tenido que retirarse de los Consejos de las Cajas en estos pasados meses. con motivo de lo dispuesto en el decreto de 3 de abril de 1975. Los consejos son gratuitos, y ellos han dedicado a fines comunitarios es fuerzos y tiempo sin compensación económica. El caso es que no lo habrán hecho tan mal cuando el gran boom de las Cajas de Ahorros se ha dado precisamente siendo ellos los administradores de las Cajas. Ahora bien, eso no quita para pensar que fuera necesaria una medida como. la que adoptó el Gobierno. Estoy convencido de que ha de ser positivo el efecto de estas normas. Me refiero a, ellas globalmente y en conjunto, lo cual no quiere decir que esté conforme con cada uno de los artículos de aquel decreto, en el que se abarcan realmente muchos puntos, en cuanto a la reglarmentación de consejos y status de directores de Cajas.

-¿Realmente se han renovado los Consejos con el nuevo decreto o ha producido únicamente retoques Poco importantes?

Renovaciones por edad

-No, no. La renovación ha sido muy importante, porque tiene que tener en cuenta que anteriormente no. existían topes de edad y tampoco existía tope en cuanto al número de reelecciones. En la práctica, las Cajas mantenían como norma general el criterio de la reelección de los consejeros, cuando terminaban el mandato, aunque en las dependientes de corporaciones locales sí había realmente una renovación, porque la propia de las corporaciones locales implicaba renovaciones importantes, también, en la composición de los Consejos de Administración de las Cajas.Hoy en todas ha habido designaciones nuevas y habrán de seguirse efectuando en el futuro. En algunos casos los Consejos de Administración, en sus presidentes y en la mayoría de sus miembros, están constituidos en este momento por hombres nuevos que traen, sin duda, savia revitalizadora. Han jugado, al mismo tiempo, para la renovación de topes de edad (setenta y cinco años para los consejeros y setenta para directores), el señalamiento de incompatibilidades, etc., y sólo son posibles dos reelecciones.

-¿Se negocian, entonces, previamente los nombramientos? Pienso en el de director general de la Caixa, que recientemente protagonizó la prensa catalana y madrileña.

-La inmensa mayoría de ellos por supuesto que ni se negocian, ni siquiera se prenotifican, porque, como es lógico, son muchos puestos los de todos los consejos, en conjunto, de las Cajas de España. Lo que ocurre es que las elecciones, individualmente consideradas, se hacen con cuidado, pensando en personas de prestigio, de confianza en cada zona, ya que esto es fundamental para el buen funcionamiento de las Cajas, y el Gobierno no ha tenido necesidad de utilizar el procedimiento del veto. Respecto a la reciente elección del director general de la Caixa en Barcelona, la conducta ministerial ha sido la de dejar que el Consejo de la Caixa seleccionara libremente la persona que el propio Consejo ha estimado más conveniente, adecuada y capaz.

¿Qué es la Confederación?

-La Confederación como organismo unitario de las Cajas ¿es institución autónoma o impuesta por la Administración?-La Confederación es nacida de abajo-arriba, y no al revés; es una asociación de Cajas y fue creada precisamente por las propias Cajas. Se gobierna democráticamente desde siempre, y en todo momento se ha gobernado así. Su presidente es elegido por los representantes de todas las Federaciones Regionales de Cajas por votación secreta, y el director general es también elegido por la propia Asamblea de la Confederación. La posible intervención del Gobierno en cuanto a la designación de Consejos y directores en Cajas de Ahorros se reduce, salvo peculiaridad de los Estatutos de alguna Caja concreta, a que el Ministerio de Hacienda puede vetar el nombramiento que el Consejo haya efectuado, durante un plazo de dos meses. Cabe reconocer y decir que esto no se produce en la práctica. Desde hace muchos años no se ha dado ningún veto y prácticamente desde siempre ha seguido el Ministerio igual conducta.

¿Cuáles son las funciones más importantes de la Confederación?

-La Confederación tiene en realidad múltiples actividades y misiones respecto a la Cajas, sin mengua de que respete plenamente la autonomía de las mismas. Yo digo que la Confederación es un invento de las Cajas. para estar unidas en todo aquello en que les interesa, pero manteniéndose separadas y autónomas en todo aquello en que les interesa mantenerse separadas. La Confederación, por una parte, es la Asociación Nacional de Cajas, que defiende sus intereses. Foro común en el cual debatir los temas que a las Cajas les afectan, y a su vez, organismo financiero nacional de las Cajas; en cierto modo, Caja de Cajas. Actúa como Cámara de compensación entre las Cajas. Y a través de la Confederación se efectúa también la suscripción de los valores computables para la inversión. Obligatoria. Por otra parte, la lista de ayudas a las Cajas es numerosísima, puesto que la Confederación se encarga de la promoción y propaganda en el ámbito nacional, de labor de asesoría, de auditoría, de las estadísticas nacionales, representaciones en el extranjero para atención a nuestros emigrantes, formación profesional de los empleados; en nuestra cámara de valores depositan sus carteras y a veces incluso las de sus clientes; se facilita el intercambio para que se pueda operar en las oficinas de las demás cajas, etc,

-¿Cómo se financia la Confederación?

-La Confederación tiene en realidad doble vía de financiación: de una parte, una cuota como cualquiera Asociación, y por otra parte, como organismo financiero que es tiene sus propias posibilidades.

Los impuestos de las Cajas

-La Banca señala habitualmente la discriminación impositiva entre Bancos y Cajas, y el mismo ministro aludió a ello en Zaragoza hace unos días. ¿Qué piensan las Cajas sobre el tema?-El fundamento del diferente tipo por el que se tributa en cuánto al impuesto de sociedades no. está, por supuesto, como se ha dicho, en la estrecha relación que tiene que existir entre Ministerio de Hacienda y Cajas. El diferente trato fiscal deriva de la diversa naturaleza de las entidades mercantiles que tíenen un capital privado y que reparten los beneficios a sus accionistas y la que es propia de entidades benéficas que no tienen capital privado, ni accionistas, y que destinan sus beneficios a, obras sociales. Este es el fundamento y no otro, No se puede ignorar todo lo que de los beneficios de las Cajas revierte en obras sociales, que al cubrir necesidades públicas, evidentemente, si no lo realizaran las Cajas, tendría que ir a cargo del presupuesto del Estado.

Además, el 15 por 100 de los fondos destinados a obras sociales tiene que ir precisamente a necesidades de tipo docente: para Universidades Laborales, al Ministerio de Trabajo, y al de Educación, y Ciencia, para Formación profesional.

Entre impuesto de sociedades, fondo común benéfico social y obra social propia, en la distribución más habitual de los beneficios, a base de un 50 por 100 a reservas y un 50 por 100 a finalidades benéfico-sociales, en realidad el 60 por 100 de los beneficios de las Cajas van a llenar objetivos y necesidades comunitarias.

Pór otra parte, el que el impuesto de Sociedades no recaiga sobre las cantidades que se destinan a atenciones benéficas, no es cosa peculiar en las Cajas, sino aplicación de la norma general que se aplicaba también en el impuesto de Utilidades para todos los casos en que tin precepto legal o estatutario impone la obligación de destinar determinadas cantidades a fines benéfico-sociales.

Gobierno democrático

-Las Cajas se preocupan, o han pensado en articular algún sistema para que los impositores participen democráticamente en la gestión o en el control de las entidades?-Los impositores son clientes y casi coinciden con la total pobla ción del país, pues en conjunto son 29 millones de titulares de cuentas. Veo a las Cajas de Ahorros alejadas de procedimientos electorales propios de entidades políticas. Me parece muy bien que se hagan elecciones para cubrir puestos de los Ayuntamientos, de las Diputaciones, de las Cortes, etc., pero pensar que en entidades de crédito la elección de los adininistradores sea por vía democrática análoga me parece delirante. No es lo propio del mundo de entidades de crédito. Lo cual no quiere decir que no sean las Cajas democráticas. No se fuerza a nadie para que acuda a ellas. Acude el que quiere y, además, el dinero se puede sacar también cuando se quiere. Lo que hay que prócurar es que los administradores o los consejeros sean personas merecedoras de confianza.

Esto no quiere decir que no se pueda buscar vías representativas adecuadas, como ya se ha hecho en el decreto a que antes me he referido, en el cual se establecen unas representaciones propuestas por consejos de empresarios y de trabajadores, elección de personas representativas de colegios profesionales, etc., pero siempre, por supuesto, con unos criterios que no originen la confusión tremenda que sería el querer introducir en las Cajas procedimientos democráticos, propios de entidades políticas, cuando las Cajas no son entidades políticas, sino entidades de crédito.

-¿Hasta qué punto la incorporación futura de partidos políticos al proceso electoralpueden suponer cambios decisivos en la composición directiva de las Cajas, sobre todo en las de carácter corporativo, dependientes de Ayuntamientos o Diputaciones?

¿Los partidos en los Consejos?

-La simplicidad y claridad de sus propósitos hacen que las Cajas se hayan desarrollado y encajen en cualquier contexto sociopolítico pasado, actual o futuro. La evolución que en el país pueda producirse no es obstáculo para que pyedan seguir cumpliendo y desarrollando sumisión. Las Cajas, en realidad; tienen todavía vigente un estatuto del año 1933, y luego, después de la guerra, es cuando se han desarrollado extraordinariamente, bajo el régimen de franco, acogidas a un Estatuto que lleva la firma de Largo Caballero y que no se consideró preciso sustituir. Esto indica que en realidad están fuera de los vaivenes políticos que en él país pueda haber.-Por otra parte, si se diera una evolución hacia tendencias de tipo socialmente más avanzado, las Cajas precisamente son, pudiéramos decir, el sector más social del sistema: crediticio. De todas formas, soy partidario de que estén alejadas de las luchas partidistas, y en las Cajas corporativas aspiramos a la neta diferenciación e independencia entre Corporación local y Cajas de Ahorros.

-¿Cómo son en este momento las relaciones entre las Cajas y el Ministerio de Hacienda, después de los incidentes registrados en la reciente Asamblea de Zaragoza?

-No hubo propiamente incidentes. En marzo, las Cajas de Ahorros, no se mostraron conformes con el proyecto que planteó el Ministerio de Hacienda, de aumento del coeficiente de inversión, que en un principio iba a ser de cinco enteros y luego, al final, quedó en una subida de tres enteros. Efectivamente se produjo un roce. Esto fue en el mes de marzo pasado, y creo que las cosas se habían serenado antes ya de la reciente Asamblea de Zaragoza. Nos volcamos en la Asamblea en cordialidad y en voluntad y seguridad de coláboración de las Cajas con el Ministerio. Mientras nuevos hechos no se produzcan, cabe decir que las relaciones entre las Cajas y el Ministerio están en el punto en que el vicepresidente y ministro de Hacienda las colocó en su discurso de clausura.