"Tenemos que estudiar las ofertas reformistas de Arespacochaga"

«La política que se sigue con las asociaciones es en ocasiones incongruente», dice José Carlos Alía, promotor de la Asociación de Vecinos de La Ventilla, en trámites de legalización, ante la oferta del alcalde de Madrid para que se incorpore como interlocutor a las tareas de la Junta Municipal de Distrito. Esta oferta ha causado fuerte polémica entre los vecinos.

Durante la visita del alcalde de Madrid, señor Arespacochaga al barrio de Tetuán, dentro de su gira por las diferentes zonas de la capital, surgió un hecho que, en alguna manera, inquieta y preocupa a los vecinos. Pidió...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

«La política que se sigue con las asociaciones es en ocasiones incongruente», dice José Carlos Alía, promotor de la Asociación de Vecinos de La Ventilla, en trámites de legalización, ante la oferta del alcalde de Madrid para que se incorpore como interlocutor a las tareas de la Junta Municipal de Distrito. Esta oferta ha causado fuerte polémica entre los vecinos.

Durante la visita del alcalde de Madrid, señor Arespacochaga al barrio de Tetuán, dentro de su gira por las diferentes zonas de la capital, surgió un hecho que, en alguna manera, inquieta y preocupa a los vecinos. Pidió a uno de ellos, concretamente al presidente de la Asociación de Vecinos de la Ventilla, José Carlos Alía González, que se integrara en la Junta Municipal de Distrito. A esta propuesta del alcalde, respondió el teniente de alcalde, señor Morán Navalón, que el cupo de personas en la Junta Municipal de Distrito está cubierto. El señor Arespacochaga invitó entonces a José Carlos Alía a asistir a los plenos de la Junta. Los vecinos, ante esta propuesta, reaccionaron de diferentes formas, unos favorablemente y otros no tanto. La respuesta del señor Alía aún no se ha producido y explicó su postura en una rueda de prensa celebrada ayer en su casa.«En principio acepté asistir a los plenos de la Junta Municipal por considerar que es interesante defender los intereses de los vecinos. Si la propuesta hubiera sido integrarme en la Junta, en calidad de miembro, y si el cupo hubiera permitido mi incorporación, no habría aceptado. El señor Arespacochaga, ante la imposibilidad de que yo me incorporara a la Junta apuntó la posibilidad de desdoblar el distrito en dos y crear dos Juntas Municipales. De cualquier forma esa posibilidad aún no se ha realizado.

«Mi reacción ante esta oferta fue convocar una asamblea de vecinos. Ellos aceptaron que, en tanto no se tome una decisión definitiva, asista a estos plenos. Creo que, a título personal y sin que interfiera para nada en la resolución de las asambleas de vecinos de la zona, debo aclarar mi postura a fin de no crear suspicacias. La situacion es rara. Creo que el alcalde no llevaba idea de hablar con los vecinos, sino con sus técnicos porque, de no ser así, habría avisado su visita con antelación para que pudiéramos preparar una serie de estudios y, peticiones que no nos ha dado tiempo a preparar. No creo tampoco que el alcalde eligiera un vecino, sino un interlocutor válido en la Junta Municipal y yo debí parecerle adecuado porque le acompañé durante todo el recorrido y conozco la problemática del barrio.

«Acepté la invitación a asistir a,los plenos, porque no suponía una integración en la Junta aunque ésa era la idea del alcalde. Además, debo aclarar que no asistiré a los plenos, si no se dan tres condiciones: que el hecho esté ratificado por los vecinos y plenamente aceptado, que si los vecinos opinan que una persona no es suficiente, no acudiré a los plenos si no es en compañia de los otros representantes que los vecinos estimen oportuno, y finalmente, que el hecho de asistir no supone que aceptemos la estructura actual del Ayuntamiento. No asistimos como miembros, sino como invitados.»

Con fecha diecinueve de este mes, el alcalde envió una carta a José Carlos Alía en solicitud de que asis tiera al próximo pleno de la Junta. Ayer día veintiocho, aún no había llegado a su domicilio la invitación correspondiente, por parte del tete alcalde, señor Morán Navalón.

Carlos Alía inició la carrera de ingeniero y la abandonó para dedicarse a la investigación social. Antes trabajó como repartidor y dependiente.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

-¿Como crees que se puede establecer esta colaboración Ayuntamiento-vecinos? -La colaboración, por nuestra parte, es muy clara. Consiste en presentar nuestras reivindicaciones y luchar por conseguir que se resuelvan. El hecho de estar presentes en la estructura municipal no supone el que desistamos de nuestros objetivos. Los vecinos luchan por la gestión democrática y mientras esa participación no sea efectiva seguirán con su lucha. Desde luego, si los vecinos aceptan colaboraremos e impondremos nuestras condiciones.

Nuestra actuación de la Administración frente a las asociaciones en trámites de legalización, como es el caso de La Ventilla, es de no ación y prohibiciones que sus actos en tanto no estén legalizadas: ¿No cree que es una incongruencia invitar oficialmente a participar en la gestión municipal a un señor, usted, que no es representante de los vecinos, de derecho, ya que éstos no pueden elegirle presidente de derecho, según la ley?

-Este tema entra dentro de la opinión del señor Arespacochaga. La política que se sigue con las asociaciones es, en ocasiones, incongruente, nuestra forma de luchar contra esta contradicción es que la asociación sea inmediatamente legalizada. Nuestra zona tiene un movimiento asociativo relativamente bajo, en comparación con otras.

Archivado En